BUENOS AIRES.- Entre octubre de 2006 y septiembre de 2009, las principales fuerzas sindicales de la Argentina resolvieron en siete oportunidades sus diferencias políticas y sus intereses corporativos haciendo uso de la violencia, en una forma desmedida y descontrolada de tener el control político. Incluso, esta forma de protesta fue empleada reiteradamente para amedrentar a empresarios y funcionarios políticos renuentes a acatar, sin límites, los reclamos del sector sindical.
Palos, piedras, armas de fuego, petardos, bengalas y todo elemento contundente que ayude a ahuyentar al contrario fueron algunos de los medios de coerción que utilizaron desde ambos lados de la disputa: tanto desde el sector oficialista de turno como desde el opositor.
Los enfrentamientos más violentos comenzaron el 17 de octubre de 2006, cuando se enfrentaron grupos del sindicato de los camioneros y de la Uocra (Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina) durante los traslados de los restos de Juan Domingo Perón en la Quinta de San Vicente.
Balazos y piedrazos cruzaron de un grupo hacia el otro, lo que dejó al menos 35 heridos antes de la llegada del cadáver de Perón, y dio paso a una tarde dramática, en la que las peleas siguieron hasta el instante mismo en que el cuerpo fue depositado en el mausoleo levantado para ese fin en la quinta.
Otro hecho de violencia se produjo el 24 de noviembre de 2006, esta vez con un muerto ya que asesinan a puñaladas a un delegado durante una asamblea de la Uocra. Pablo Donato Molina (45), delegado gremial, murió apuñalado en el pecho en medio de una gresca protagonizada por facciones opuestas del sindicato, a metros de la filial que el gremio posee en Quilmes. El enfrentamiento se produjo durante una reunión de 30 delegados.
Una nueva pelea entre gremialistas de la construcción y camioneros se produjo el 14 de mayo de 2008, incidentes que provocan 14 heridos, dos de ellos de gravedad, durante un acto del PJ en el Club Almagro.
Militantes del Sindicato de Camioneros, que conduce Hugo Moyano y de la Uocra, liderada por Gerardo Martínez se enfrentaron con golpes, piedras, palos y botellas durante el discurso de la presidenta, Cristina Kirchner.
Mientras que el 15 de octubre de 2008, un enfrentamiento gremial y político entre sectores antagónicos de la construcción dejó cuatro heridos de bala. La gresca fue entre un sector duhaldista y otro kirchnerista.
El 20 de noviembre se produjo un tiroteo entre gremialistas petroleros y de la Uocra, que provocó la muerte del delegado Ariel Quiroga (de 36 años), de Malargüe. El 3 de diciembre de 2008, un choque a tiros en Rosario provocó la muerte de un sindicalista del sector lácteo.
Por último, el 16 de setiembre de 2009 una pelea entre petroleros dejó un herido de bala grave y tres mujeres con lesiones leves. Ocurrió mientras se intentaba desocupar la sede del gremio en Caleta Olivia. (Especial)