QUITO, Ecuador.- El presidente de Ecuador, Rafael Correa, llegó esta noche al Palacio Carondelet, donde lo esperaban los ministros de su Gabinete, mientras una multitud de seguidores aguardaba su arribo en la Plaza de la Libertad, en la capital ecuatoriana. El mandatario llegó luego de ser rescatado en medio de un fuerte tiroteo en el que se enfrentaron fuerzas del Ejército contra los policías sublevados. Las fuerzas regulares los rescataron de un hospital en el que se encontraba refugiado.
Desde el balcón del palacio gubernamental, y ante una multitud de ciudadanos, el mandatario dijo que "con profunda tristeza cómo se derramó inútilmente sangre ecuatoriana". "Fui secuestrado por un grupo de pseudo policías con muchos infiltrados que sólo pensaban en conspirar", aseguró.
Desde el balcón del palacio gubernamental, y ante una multitud de ciudadanos, el mandatario dijo que "con profunda tristeza cómo se derramó inútilmente sangre ecuatoriana". "Fui secuestrado por un grupo de pseudo policías con muchos infiltrados que sólo pensaban en conspirar", aseguró. También agradeció al pueblo ecuatoriano por apoyar al Gobierno y se comprometió a "no negociar nada" y a "castigar" a los responsables de la sedición. Agradeció también a los mandatarios de Unasur "que se reunirán en Buenos Aires".
El jefe de Estado señaló que "quienes se sublevaron no fueron todos los policías y militares", y volvió a responsabilizar elípticamente por la rebelión al ex mandatario Lucio Gutiérrez. "Fuimos a dialogar al Regimiento de Quito, donde tengo tantos amigos; nadie ha hecho tanto por la Policía como este Gobierno, nadie mejoró tanto sus sueldos; cuando vi esta agresividad, me sentí triste, como si hubiera recibido un puñal por la espalda", manifestó en su discurso.
Tiros y violencia
En el operativo en el que se rescató a Correa del Hospita Policial hubo fuertes enfrentamientos con armas de fuego en el que resultaron muerto al menos tres policías que formaban parte de los 200 efectivos que se habían sublevado, en reclamo de remuneraciones que el Gobierno había suprimido. El operativo fue coordinado por el Grupo de Operaciones Especiales y duró casi 40 minutos. En su mensaje, el presidente ecuatoriano afirmó que de parte de las fuerzas del Ejército se registraron al menos cinco heridos. (Télam-DPA)