El Gobierno apuesta a encontrar petróleo en Tucumán. Con esa premisa, la Legislatura facultará en la sesión de hoy al Poder Ejecutivo a firmar un convenio con la empresa YPF SA, lo que permitirá a la compañía concretar exploraciones en todo el territorio provincial.
Ayer, el gobernador, José Alperovich, reconoció que existen estudios previos que alientan perspectivas de éxito. "Tuve un contacto con el vicepresidente de YPF, Sebastián Eskenazi, y ellos quieren buscar la manera de explorar en Tucumán para ver si hay gas o petróleo. Quieren hacerlo, la idea es que la Legislatura lo autorice con el proyecto y, ya con la ley, se firmará en Tucumán un convenio", precisó el mandatario provincial.
Compromisos
El modelo de acuerdo que firmará el Poder Ejecutivo es similar al que tiene previsto rubricar Entre Ríos, también con esa compañía petrolera. En rigor, las posibilidades de exploración están previstas en el denominado "Plan Argentina", establecido en 1991. Este programa posibilita la apertura periódica de ofertas para la obtención de permisos de exploración y de solicitudes para reconocimiento superficial en el país.
Con posterioridad, en 2006, el Congreso sancionó la Ley Nº 26.197 (más conocida como "Ley Corta") que transfiere a las provincias petroleras los permisos y las concesiones de exploración de hidrocarburos. Con el sustento legal de esos instrumentos, el convenio que autorizarán los legisladores permitirá a la empresa YPF "estudiar potenciales proyectos exploratorios", para luego proponer a la Provincia la "ejecución y el desarrollo de actividades exploratorias".
Como contrapartida, el Gobierno se compromete a mediar (el texto habla de "ofrecer los buenos oficios") en los eventuales inconvenientes que puedan surgir entre YPF y los propietarios superficiarios de las tierras o las comunidades aborígenes. También se especifica que YPF SA asumirá en forma exclusiva la totalidad de los gastos y costos que demanden los estudios y el desarrollo de los proyectos, incluido el gasto que genere el personal designado por el Estado (serán tres profesionales que podrán presenciar los trabajos de campo en carácter de capacitación).
El convenio tendrá una vigencia de dos años, aunque se renovará automáticamente por otros dos. Es decir, el vínculo con YPF regirá hasta 2014.
La empresa compartirá con la Provincia toda la información resultante de los estudios, pero el Poder Ejecutivo deberá respetar la confidencialidad de esos datos. No obstante, el Gobierno podrá convocar a un concurso público o licitación para adjudicar un permiso de exploración sobre la base de esa información. En ese caso, los pliegos deberán prever la devolución de todos los gastos e inversiones en que haya incurrido YPF, además de respetar el derecho de preferencia de esa empresa, según lo fija la Ley Nº 17.319 (de Hidrocarburos).
Antecedentes
No es la primera vez que un Gobierno decide dar impulso a un estudio profundo para determinar la existencia y posterior exploración de hidrocarburos.
De hecho, trabajos realizados por YPF y por la Subsecretaría de Combustibles de la Nación en 1991 ya daban cuenta de la posibilidad de que hubiera yacimientos en el área "Santa María", que comprendía un sector de Catamarca y otro de Tucumán en los departamentos de Tafí del Valle, Monteros, Chicligasta, Río Chico, Alberdi y La Cocha. Paralelamente, se definieron otras dos secciones: "Arenal", que comprendía Burruyacu; y "Tucumán Oriental", que incluía Cruz Alta y Leales. Los proyectos, sin embargo, quedaron truncos.
En 1994, durante la gestión de Ramón Ortega, YPF y el consorcio de las empresas Petro América SA y Dong Won Co. Ld. concretaron sendas ofertas para la exploración en áreas de Tucumán, Salta y Santiago del Estero. Tampoco se obtuvieron resultados.
Lo mismo pasó en 1998, cuando la empresa Kilwer SA manifestó su interés por indagar en zonas del sur tucumano y, particularmente, en áreas de la Sierra de Medina, al límite con Santiago del Estero. Inclusive, formalizaron un pedido de autorización al entonces gobernador, Antonio Bussi.