La distancia entre la planta de Pacará Pintado y el nuevo predio de Overa Pozo ronda entre los 38 y los 44 kilómetros. Ese recorrido, que tendrán que hacer los camiones de la empresa Transportes 9 de Julio SA, implica un costo adicional en la prestación del servicio.
Por esa razón, se abrió una etapa de negociación a fin de determinar el monto que cobrará la firma privada. Ese costo del flete de la basura desde una planta a la otra estará a cargo del Gobierno provincial.
Una de las cifras que se baraja hasta ahora, según trascendió, es de $ 34 por tonelada. Este valor no es antojadizo, sino que se toma como parámetro el costo del transporte de granos (actualmente en $ 45 por tonelada, desde San Miguel de Tucumán hasta el límite con Santiago del Estero).
El consorcio está integrado por seis municipios (San Miguel de Tucumán, Banda del Río Salí, Alderetes, Las Talitas, Tafí Viejo y Yerba Buena). En conjunto se calcula que las seis ciudades generan alrededor de 800 toneladas de basura por día.
Es decir que el flete de la basura desde Pacará Pintado hasta Overa Pozo podría tener un costo de $ 9,9 millones por año. Sin embargo, las negociaciones todavía no están cerradas. En este marco, se especula con la posibilidad de bajar la tarifa, a partir de que se trata de una relación contractual a largo plazo: no es lo mismo hacer un flete temporario que mantener un servicio fijo permanente.
Dos décadas
El objetivo es que el nuevo predio de Overa Pozo sea utilizado para la disposición final de los residuos sólidos urbanos durante 20 años, como mínimo. En la primera etapa, hasta 2012, la explotación del terreno estará en manos de la empresa Servicios y Construcciones La Banda SRL.
Cada municipio deberá abonar el servicio de recolección y de disposición final, como viene haciéndose hasta la fecha. La única modificación introducida, a partir de la creación del consorcio, es que se abrirá una cuenta bancaria única para que el consorcio administre los fondos de los seis municipios.
La intención de poner en funcionamiento la nueva planta ingresó en la etapa final. El ritmo de trabajo se aceleró en los últimos días y, según los cálculos más optimistas, el predio podría comenzar a operar antes de fin de mes. "Nos importa que comience a funcionar cuanto antes, porque Pacará Pintado tiene un límite y si demoramos se puede complicar", explicó ayer el intendente de Yerba Buena, Daniel Toledo.
El jefe municipal dijo que en la última reunión del consorcio, realizada esta semana, se informó sobre los avances de obra. Respecto del flete, Toledo precisó que en Overa Pozo habrá un mayor control sobre la cantidad de basura, porque se instaló una balanza. "La Provincia hará su aporte para solventar ese costo", remarcó.