A criterio del ministro del Interior, Florencio Randazzo, los referentes de la oposición están empecinados en obstruir al Gobierno. Con ese propósito, sostiene, impulsan proyectos inaplicables, como el 82% móvil a los jubilados.
En diálogo con LA GACETA, el funcionario fue contundente. "Me parece que la oposición renunció definitivamente a ser una alternativa; por eso propone cosas muchas veces irresponsables e imprudentes, como la posibilidad del 82% móvil. ¿Quién puede estar en contra? Nadie, absolutamente nadie. Pero hay que ser muy prudentes y respetuosos", sostuvo.
Randazzo adujo que pocos gobiernos hicieron tanto por el sector pasivo como el actual. "Podemos dar muestras claras de cuál fue la política en materia de nuestros jubilados: 15 aumentos consecutivos del mínimo, la incorporación de 2,5 millones de jubilados y pensionados, y la ley de movilidad jubilatoria, para que en marzo y en setiembre puedan tener una actualización automática. Incluso, la decisión política de la Presidenta para que los fondos que manejaban las AFJP vuelvan al Estado", enumeró. Cuando se le preguntó si con esos recursos se podía financiar el 82% móvil, fue cauteloso: "tenemos que hacer un manejo responsable de esos fondos, primero porque no lo tenemos a todo en líquido".
Insistió en que la oposición sólo ataca al kirchnerismo. "A los opositores los une un único objetivo: que al Gobierno no le vaya bien, creyendo que al Gobierno se le acortan las posibilidades electorales de cara a 2011. Insisto, hay una oposición de una enorme irresponsabilidad, que no ve la posibilidad de ser alternancia. Porque sus proyectos -en caso de sancionarse, cosa que dudo-, pondrán en jaque la estabilidad macroeconómica", dijo.
Finalmente, refutó las denuncias por corrupción en el comercio bilateral con Venezuela. "No se pudo conseguir ni un empresario que ratificara esa denuncia, que por otra parte hizo la fuerza que conduce (Elisa) Carrió y que después fue acompañada por el ex embajador (Eduardo) Sadous, seis años después de dejar la Embajada", afirmó.