Los avances en inteligencia artificial podrían costarle a Wall Street hasta 200.000 empleos en los próximos tres a cinco años, según un informe de Bloomberg Intelligence. Directores de tecnología de grandes bancos globales prevén una reducción promedio del 3% de su plantilla, impulsada por la automatización de tareas rutinarias. Sectores como el back office, middle office y atención al cliente se perfilan como los más afectados. Sin embargo, el informe también señala que la IA transformará la fuerza laboral, en lugar de eliminarla por completo.

El impacto financiero de esta transición es significativo. Se proyecta que los bancos podrían aumentar sus beneficios antes de impuestos entre un 12% y un 17% para 2027, gracias a la mejora en la productividad generada por la IA. Esto podría representar hasta 180.000 millones de dólares adicionales en sus resultados combinados. Ocho de cada diez directivos encuestados esperan que la IA generativa impulse la generación de ingresos en al menos un 5% durante los próximos años, marcando un cambio fundamental en las operaciones bancarias.

A pesar de la pérdida de empleos, algunos líderes destacan el potencial positivo de la IA. Jamie Dimon, de JPMorgan, afirmó que la tecnología mejorará la calidad de vida, reduciendo horas de trabajo y potenciando avances médicos. Mientras tanto, empresas como Citi han advertido que el sector financiero es especialmente vulnerable a la automatización, aunque los roles evolucionarán más que desaparecerán. La adopción de IA refleja una modernización continua que busca equilibrar eficiencia con innovación.