La serie de Ayrton Senna de Netflix reveló varios detalles sobre la vida de la leyenda brasileña de la Fórmula 1. La producción muestra desde los inicios del piloto hasta su trágica muerte en el Gran Premio de San Marino de 1994. Uno de los personajes más llamativos es Laura Harrison, un periodista que critica al conductor por su estilo agresivo en las carreras. Pero, ¿el personaje existió?
La miniserie se lanzó el 29 de noviembre en Netflix. Los capítulos tienen una duración de una hora, y el objetivo es acercarse lo máximo posible a la vida de Senna. Es por eso que el registro no se centra únicamente en los triunfos del tricampeón, sino que explora sus relaciones personales, rivalidades y los momentos que definieron su trayectoria en las pistas.
Laura Harrison, interpretada por Kaya Scodelario, es una periodista que critica a Senna. Sin embargo, el personaje no existió en la vida real, sino que es la personificación de aquellos comunicadores que reprobaban la conducta del brasileño. De este modo, es un símbolo del poder del periodismo en la historia del brasileño.
¿Quién fue el piloto argentino que compartió equipo y se peleó con Ayrton Senna?
La serie de Ayrton Senna, la leyenda brasileña de la Fórmula 1, se estrenó la semana pasada en Netflix y se convirtió en una de las tendencias del momento. La entrega audiovisual reveló diferentes detalles de la vida del piloto, y entre ellos reveló que hubo una rivalidad con un piloto argentino en la Fórmula Ford: Enrique Mansilla.
El argentino corrió con Senna en 1981 –antes de que el brasileño cambiase su apellido paterno por el de su descendencia materna (Silva)- en el campeonato de monoplazas de Fórmula Ford 1600. Ambos representaban al equipo Van Diemen.
Una de las escenas más llamativas se dio cuando Mansilla y Senna protagonizaron una fuerte discusión por una maniobra de carrera y el argentino lo toma por el cuello fuera de la pista. “Sí, lo que pasaba es que a él no le gustaba perder ni a la bolita. Perdió una, perdió la segunda cuando perdió la tercera en Mallory Park no le gustó para nada, igual lo del toque fue una mala interpretación por parte de él. Imaginate que la carrera era muy pareja, nos tocamos en una curva durante la última vuelta, la victoria quedó en mis manos y él debió conformarse con el segundo lugar. La cosa siguió en la zona de boxes, donde dos asistentes nos tuvieron que separar. Después de lo que paso, Firman nos separó y ambos pudimos ganar sendos campeonatos. Haber corrido con Ayrton era muy divertido, era a todo o nada, impresionante”, dijo “Quique”.