Para los amantes de las aventuras y del turismo local, el sur de la provincia alberga su secreto mejor guardado. Los lugareños lo conocen y lo disfrutan cada verano, porque en el corazón de La Cocha, unas cascadas los convocan en cada día de calor intenso.

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El paisaje es puro verde. Las yungas dan el escenario perfecto a las cascadas atificiales que se esconden tras túneles abandonados. Una breve caminata separa la ruta del destino y durante el camino para llegar, la vegetación refresca a los visitantes y las aves acompañan con su canto pacífico y relajante.

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Los influencers que están a cargo de la cuenta @masrutaxfavor compartieron uno de sus paseos a las Cascadas de Rumi Punco, una localidad ubicada en La Cocha. Su nombre en quichua significa "puerta de piedra" y parece descibrir a la perfección la situación de las cascadas, que se encuentran detrás de unos enormes y macizos túneles de puro concreto.

Para llegar hay que hacer un viaje hasta La Cocha por la Ruta Nacional 38 hasta las inmediaciones del Río Huacra, que demarca el límite entre Tucumán y Catamarca. Los túneles que llevan a ella antiguamente eran usados por el ferrocarril que llegaba desde la provincia limítrofe y que hoy está inhabilitado.

Uno de los túneles por los que pasaba el ferrocarril.

La dificultad del trekking es baja: los senderos están bien marcados y los bellísimos paisajes -según describen los influencers de turismo-, acompañan a los caminantes. Hay solo 45 minutos entre la ruta y las cataratas. El paseo se puede hacer durate todo el año, pero en épocas de lluvias hay que tener especial cuidado con la crecida del río.

"Cascadas", en plural, porque son dos: detrás del primer túnel hay una que tiene un gran piletón usado como una refrescante laguna; luego, un segundo túnel y una segunda cascada, más pequeña, pero ideal para detenerse a almorzar. Se recomienda llevar protector solar, repelente y una bolsa para traer los residuos y no dejarlos en el camino.