Las especias y condimentos son un componente fundamental en las cocinas, aportando el sabor necesario a los alimentos. Pero a la misma vez son uno de los ingredientes más beneficiosos para la salud. Entre ellos se encuentra la canela que, según un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, puede proteger nuestro corazón.
Canela y arroz: el poderoso ritual para hacer los últimos días de 2024 y atraer abundancia en 2025La canela es el ingrediente de una gran cantidad de preparaciones como postres, dulces y bebidas, pero también puede ser un remedio casero y cumplir un papel crucial en nuestra salud, debido a sus propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias y antioxidantes que contribuyen a la prevención de enfermedades.
La cantidad de canela que debemos consumir para reducir el colesterol en sangre
Pero una de las características más destacadas de esta especia es su contribución a la salud cardiovascular. De acuerdo con un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, este condimento se ha relacionado con un menor riesgo de enfermedad cardíaca, que es la principal causa de muerte en todo el mundo.
Según una revisión publicada en el sitio Healthline, el condimentar con al menos 1,5 gramos (g) o aproximadamente ¾ de cucharadita de canela por día fue capaz de reducir los niveles de triglicéridos, colesterol total, colesterol LDL (malo) y azúcar en sangre en personas con enfermedad metabólica.
¿Por qué la canela puede ayudar a la salud del corazón?
Los antioxidantes que componen a este condimento son los encargados de proteger el cuerpo del daño oxidativo de los radicales libres, a la vez que pueden ayudar a combatir la inflamación reduciendo la hinchazón en diferentes zonas del cuerpo.
Otra revisión de 13 estudios encontró que la canela podría reducir los niveles de triglicéridos y colesterol total, ambos factores de riesgo de enfermedad cardíaca. A la vez, este condimento ha mostrado la capacidad de reducir la presión sanguínea cuando es consumido frecuentemente por al menos ocho semanas.