Milagroso, agónico, impensado e increíble... Para muchos, la presencia de Franco Colapinto es el motivo suficiente para ver la Fórmula 1. Fue el causante de reencender la ilusión de todo un país y de que muchos argentinos decidieran madrugar para presenciar el Gran Premio de Las Vegas. Un desafío que fue una montaña rusa de emociones para todos los seguidores del piloto de Williams. ¿Por qué? El choque en la clasificación puso en suspenso su participación en la carrera, y esa situación se extendió a varios simpatizantes que habían decidido organizar planes para verlo correr. Federico Valle, Santiago Fiol, Facundo Soria, Felipe Türpe y Federico Santilli experimentaron una situación similar, pero retrocedamos en el tiempo...
Para los amigos, el "asado fierrero" es una tradición que adoptaron para ver la temporada 2024 de la "Máxima". "Nosotros seguimos la competencia desde el año pasado, y este año nos organizamos para compartir algo en cada carrera", dijo Felipe, el organizador de la juntada. Claro, el ritual fue anterior a la aparición de Colapinto, pero el grupo admite que la irrupción del argentino le dio un tinte especial y diferente a cada carrera. Como si se sintieran un poquito más cerca del espectáculo automovilístico.
"Nos enganchamos por la idea a partir de que un amigo se compró un volante para jugar al videojuego de la Fórmula 1. Eso nos enganchó a todos y empezamos a adentrarnos más en este mundo. Ahora entendemos los tecnicismos como el undercut o el overcut ¡Ja, ja, ja!", comentó Federico Santilli.
El ritual cuenta con varios pasos. El primero, y el más importante, es definir quién será el encargado de las compras. Este motivo hace que la "carrera" comience en los días de las prácticas libres de los grandes premios. "Tenemos que coordinar un horario y la sede va cambiando. Algunas veces llegamos a ser alrededor de 10 personas", comentaron los amigos. Una vez definida esa tarea, empiezan a definirse los roles: el asador, el musicalizador, el que lleva el joystick para jugar a la PlayStation... Todo con el fin de convertir el living de la casa en uno de los palcos de los grandes autódromos del mundo. O más bien, que se acerque lo más posible.
La conversación atraviesa diferentes tópicos, pero en esta ocasión todos se encuentran preocupados por Colapinto. La fuerte colisión hizo que su presencia se pusiera en duda, y, a pocas horas del espectáculo, Williams lanzó un bendito comunicado que alegró a los amigos. Aunque, como buenos seguidores de la competición, expresaron su emoción por la definición del campeonato. “Norris es un pecho frío. Nunca fue un competidor para Verstappen. Pero viendo el rendimiento que tuvieron en las prácticas, creo que George Russell va a ganar la carrera”, vaticinó Santilli. “Para mí, Leclerc y Sainz van a tener un buen rendimiento para seguir prendidos al Campeonato de Pilotos”, auguró Türpe. “Lo único que quiero es que Colapinto haga un buen papel. Encima, para peor, sale último”, indicó Fiol.
Soria, por su parte, tiene su “bautismo fierrero”. Según cuenta, es la primera vez que vio una carrera de Fórmula 1, y para sumarse a las conversaciones lanzó varios chistes con cierta connotación futbolística. “¿A qué hora corre Colapinto?”, fue una de las preguntas que lanzó durante la cena, que se realizó una hora antes del gran evento.
Valle, por su parte, aprovechó ciertos momentos para continuar con sus tareas laborales. Al dedicarse a la programación, el joven realiza trabajos a remoto por lo que solo bastaba con utilizar una computadora para continuar con sus tareas. “El living funciona como un networking antes de que comience el gran evento”, indicó.
Minutos antes de la largada, los jóvenes se trasladaron al living para sintonizar la competición, y tras las primeras vueltas analizaron el rendimiento de cada piloto. Lo más llamativo fue que el inicio de Colapinto preocupó a todos. Claro, el argentino comenzó el trazado sin utilizar demasiada potencia, y si aumentaba en la clasificación, era porque la mayoría de los pilotos ingresó a boxes para modificar el tipo de neumáticos. “Se ve que se está cuidando. Quizá esté nervioso por los últimos choques. Mirá todavía no pudo pasarlo a (Valtteri) Bottas”, renegó Santilli.
Frente a la cautela de Colapinto, los amigos optaron por hinchar por Guanyu Zhou. El piloto de Sauber estuvo en la zona de puntos durante gran parte de la carrera, y más de uno aplaudió a la hora de pasar a sus contrincantes. “Hoy tiene que sumar”, gritó Soria, mientras comenzó un cántico para alentar al chino. Y si bien se mantuvo expectante en las primeras vueltas, el sueño lo alcanzó y terminó dormido sobre un sillón.
Lewis Hamilton, en tanto, se llenó de elogios por parte de los fanáticos. El heptacampeón empezó en la décima posición, pero rápidamente empezó a escalar en el ranking hasta colocarse en el segundo puesto. “Es increíble que siga haciendo esas maniobras y, sobre todo, como lo aguanta a Carlos Sainz”, indicó Türpe.
Tampoco puede pasarse por alto el momento en el que Alex Albon abandonó la carrera. Pese a que pertenezca al mismo equipo que Colapinto, los amigos festejaron la deserción del tailandés, que una vez más tendría un flojo rendimiento.
Fiol, por su parte, optó por ver la carrera desde su celular para seguir el segundo a segundo de la carrera del argentino. Así celebró a lo grande cuando Colapinto sobrepasó a Bottas y a Esteban Ocon. “Ya está 13° y ahora va por el ‘Checo’ Pérez. Está haciendo un carrerón”, señaló. Quizá por precaución, o por falta de potencia, el piloto de Williams no pudo sostener la posición, y en la última vuelta fue superado por Zhou –finalizó 14°–.
El triunfo de Russell en Las Vegas y el campeonato de Verstappen no cambiaron la tónica del ambiente. Los amigos sentían que los monoplazas de Mercedes habían sido los mejores de la prueba, aunque tampoco pasaron por alto la regularidad del holandés a lo largo de la temporada.
Así pasó una nueva jornada de la Fórmula 1, y para ellos un nuevo capítulo de esta práctica que tanto aman realizar. Sí, ellos encontraron en la Fórmula 1, una excusa para compartir entre amigos y disfrutar de los mejores pilotos del mundo.