De a poco, Atlético empezó a encontrar solidez defensiva. Tras una Copa de la Liga donde fue el tercer equipo que más goles recibió, el “Decano” empezó a acomodarse en la actual Liga Profesional, y sobre todo, en los últimos partidos: recibió sólo cuatro goles en los últimos cinco partidos. En esa defensa, parece estar ya asentado Néstor Breitenbruch, que recuperó su lugar en el equipo tras varios meses complicados por las lesiones, y que disfruta de su momento.

El defensor, que llegó este año al club proveniente de Arsenal de Sarandí, había sido titular en cinco de las primeras siete fecha de la Copa de la Liga, y parecía consolidarse en el equipo. Pero un desgarro en el isquiotibial y otro en la pantorrilla, a lo que hay que sumar el contagio de dengue en el medio, lo dejaron fuera de las canchas por un tiempo. Recién volvió a jugar en la décima fecha de la Liga, en el triunfo 1-0 sobre San Lorenzo, tras casi seis meses de inactividad. Y tras ausentarse en las fechas siguientes, volvió al equipo en la 16°, para ya no volver a salir.

“Por suerte, últimamente vengo jugando. Me vengo sintiendo cómodo en el equipo, y venimos jugando bien, haciendo una buena campaña”, destacó Breitenbruch, en diálogo con LA GACETA.

Algo que caracteriza al ex jugador de Independiente es su polifuncionalidad en la defensa: a veces le toca jugar de lateral, a veces de central. “Me siento cómodo en las dos posiciones. Es verdad que inicié mi carrera como lateral, pero hace bastante vengo jugando también como central.  El técnico sabe que puede confiar en mí en cualquiera de las dos posiciones, y eso es bueno”, subrayó al respecto Breitenbruch, que destacó la competencia interna que hay en el equipo. “Eso ayuda al crecimiento de todos. Sabemos que nadie se puede relajar, porque el que viene atrás lo viene haciendo bien”, consignó.

Una buena adaptación

Más allá de las complicaciones por las lesiones, que le impidieron tener los minutos que le hubieran gustado, Breitenbruch contó que se siente muy cómodo no sólo en el club, sino también en Tucumán.

“Es una provincia tranquila. El tucumano siempre te tira buena onda, por la calle te saluda, te tira buena onda, por ahí te hacen un chiste. Nunca me tocó vivir un mal momento, siempre palabras de apoyo”, aseguró el defensor.

Y no sólo es él quien está bien aclimatado: también lo está su familia. “Mi nena tiene seis años, va a primer grado, y armé una linda relación con los padres de sus compañeritas. Mi señora juega al hockey, y arrancó en un club, así que está contenta. Estamos súper cómodos en Tucumán”, contó Breitenbruch.

Lo único que lo hizo sufrir un poco, admite, fue el clima. “Me costó al principio, hace mucho calor y hay mucha humedad, pero me acostumbre bien”, indicó.

Y así como su pareja juega al hockey, el misionero también tiene sus hobbies: uno de ellos es jugar al tenis. “Juego, pero soy medio de madera, ja”, asegura. “Tengo algunos vecinos que juegan; por ahí, si tengo algún fin de semana libre, jugamos”, agregó.

La ilusión intacta

Aunque reconoce que la mala campaña en la Copa de la Liga comprometió las chances de pelear por la clasificación a una competencia internacional, Breitenbruch afirmó que Atlético luchará hasta el final para conseguir ese objetivo.

“Es una lástima que no nos haya ido tan bien en la primera parte del año. Clasificar a una copa siempre fue el objetivo, desde principio de año. Hoy todavía lo podemos cumplir, así que tenemos que pensar partido a partido; si sumamos la mayor cantidad de puntos se puede dar”, dijo al respecto.

Por lo pronto, apuntaló, el objetivo más cercano es el partido de mañana ante Gimnasia, donde el objetivo “Decano” será volver a ganar de visitante, algo que no consigue desde agosto. “Estuvimos hablando un poco con el cuerpo técnico y con los chicos, y nos gustaría darnos un partido de visitante así como lo venimos haciendo de local. En nuestra cancha por lo general lo hacemos muy bien, tenemos al rival metido atrás y creamos muchas situaciones de gol, pero de visitante nos viene costando últimamente. El objetivo para este partido es tratar de hacer lo mismo que hacemos de local”, anticipó.

Y mientras encara el tramo final de la temporada con la ilusión latente, Breitenbruch admitió que le gustaría seguir en Atlético en 2025. “Se me termina el contrato ahora a fin de año, pero si me preguntan, obvio que me encantaría quedarme. Pero no depende solamente de mí”, concluyó Breitenbruch, que hoy intentará seguir afianzándose en el equipo, y contribuir, en lo posible, a que el “Decano” obtenga un nuevo triunfo.