Un estudio realizado por la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta) reveló que la vida de los adolescentes en Tucumán está cada vez más mediada por la tecnología. Según el informe, la mitad de los adolescentes tucumanos pasa más de 7 horas diarias en internet, lo que pone de manifiesto el grado de hiperconexión y dependencia tecnológica en este grupo etario.

El Informe de Uso Responsable de las TICs y Riesgos Digitales en Adolescentes de Tucumán fue realizado con la colaboración de 335 adolescentes de entre 15 y 18 años de diferentes colegios y escuelas del Gran San Miguel de Tucumán. Los sondeos se desarrollaron durante la Expo Unsta en octubre con el objetivo de analizar los hábitos digitales de los jóvenes y las principales problemáticas asociadas al uso de estas tecnologías.

Entre los hallazgos se destaca que el acceso temprano a dispositivos móviles es una realidad ineludible. Casi 7 de cada 10 adolescentes tuvo su primer celular antes de los 12 años. El 22,2% lo logró entre los 7 y los 9 años, y el 14,7% incluso antes de los 7 años. Esta tendencia subraya la necesidad de iniciar la educación digital desde edades más tempranas para fomentar un uso responsable.

Este dispositivo genera una dependencia emocional y funcional en los adolescentes, ya que dos de cada tres adolescentes (64%) volvería a buscar su celular si lo olvida en casa. Además, el 64,2% de los adolescentes duerme junto a su celular, lo que puede impactar negativamente en sus hábitos de sueño y salud digital.

De qué manera se vinculan con el celular

Aunque la tecnología es una parte central de la vida de los adolescentes, pocos priorizan la desconexión. El 38% nunca apaga su celular, mientras que sólo el 36% lo hace diariamente. Este hábito podría estar relacionado con el miedo a perderse algo (FOMO, por sus siglas en inglés) y una necesidad de conexión constante.

Nueve de cada 10 chicos tucumanos pasa más de tres horas diarias en internet, y uno de cada dos (50,1%) supera las siete horas diarias. Este uso prolongado podría estar relacionado con la hiperconexión, y el tiempo excesivo en redes sociales y otras actividades digitales.

Aunque las redes sociales (91%) y los mensajes (94%) lideran el uso, ocho de cada 10 adolescentes (86%) también utiliza el celular para estudiar. Esto muestra una integración del dispositivo tanto en el ocio como en el aprendizaje. El uso recreativo sigue siendo relevante: 75% ve videos y 71% juega. Los resultados sugieren un equilibrio entre actividades educativas y de entretenimiento.

Uso de inteligencia artificial

El 84% de los adolescentes utiliza inteligencia artificial (IA) para actividades educativas, lo que refleja una adaptación positiva a herramientas innovadoras que pueden complementar la enseñanza y el aprendizaje. Por este motivo, la mayoría de ellos, el 97%, valora la educación digital en la formación de hábitos tecnológicos responsables y preventivos.

El Informe busca ser una herramienta para la reflexión y la acción. Proporciona un diagnóstico claro y actualizado que sirve de base para diseñar medidas preventivas, fortalecer programas educativos, y generar políticas públicas en torno a la ciudadanía digital y la seguridad en línea.