Con la llegada del verano, el uso del aire acondicionado se convierte en una necesidad para enfrentar las altas temperaturas. Sin embargo, su utilización intensiva puede impactar significativamente en las facturas de energía y en el medio ambiente.
Aprender a manejar este equipo de forma eficiente no solo ayuda a reducir el consumo energético y ahorrar dinero, sino también a mantener un hogar confortable sin comprometer la sostenibilidad.
Cómo hacer que un ventilador refresque tu hogar igual que un aire acondicionado, según un arquitectoAdemás, pequeños ajustes en la configuración del aire acondicionado y en los hábitos diarios pueden marcar una gran diferencia. Desde elegir la temperatura adecuada hasta asegurar un mantenimiento regular del equipo, existen prácticas simples que, sumadas, pueden aligerar el impacto en el bolsillo y contribuir a un uso más responsable de la energía.
Cómo usar el aire acondicionado en verano para ahorrar energía y dinero
Uno de los errores más comunes al usar el aire acondicionado es establecer temperaturas demasiado bajas. Es esencial mantener el termostato entre 24°C y 26°C es suficiente para proporcionar un ambiente confortable y evitar un consumo excesivo de energía.
De acuerdo con un estudio de la Agencia Internacional de Energía (AIE), cada grado menos de temperatura incrementa el consumo eléctrico en aproximadamente un 7%.
De este modo, un ajuste adecuado del termostato no solo mejora la eficiencia energética sino que también, alivia el impacto económico en la factura.
Qué dispositivo puede reducir el consumo del aire acondicionado
Los ventiladores de techo o portátiles pueden ser aliados para mejorar la circulación del aire frío en el hogar. El uso conjunto del aire acondicionado y un ventilador permite distribuir de manera uniforme el aire, reduciendo la necesidad de mantener el aire acondicionado a una potencia elevada.
La combinación de ambas tecnologías puede permitir subir la temperatura del termostato hasta 4 °C sin sacrificar el confort. Asimismo, el aislamiento térmico adecuado es fundamental para evitar que el aire frío se escape y que el calor exterior entre.
Expertos señalan que hasta el 30% de las pérdidas de frío en una vivienda pueden atribuirse a filtraciones en ventanas y puertas. La instalación de burletes y selladores, junto a cortinas o persianas térmicas, puede disminuir estas pérdidas, lo que contribuye a un uso más eficiente y una reducción de la demanda energética.
Cómo programar correctamente el aire acondicionado
La programación del aire acondicionado para que funcione solo en los momentos necesarios es otra técnica eficiente de ahorro. Muchas unidades modernas cuentan con temporizadores o funciones de programación automáticas que permiten controlar las horas de encendido y apagado.
Esta estrategia es especialmente útil durante la noche, cuando las temperaturas suelen bajar. El uso de esta función evita el funcionamiento ininterrumpido del aparato y, como consecuencia, reduce el consumo energético.
Según informes de eficiencia energética, el uso de temporizadores y programas automáticos puede reducir el gasto en energía entre un 5% y un 15%.