La salud mental de los jóvenes es un desafío global. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión, la ansiedad y los trastornos del comportamiento son las causas de enfermedad más comunes en este segmento. Un estudio publicado este mes y realizado entre jóvenes de los Estados Unidos corrobora el diagnóstico.
Los datos más recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) indican que las tasas de ansiedad y depresión continúan en aumento en los Estados Unidos, con una incidencia particularmente alta entre los jóvenes
La evidencia refiere que casi 1 de cada 5 adultos (18.2%) reportó problemas de ansiedad durante 2022 en comparación con el 15.6% de 2019. Asimismo, las tasas de depresión entre los adultos pasaron del 18.5% al 21.4% durante el mismo período.
Los jóvenes son los más afectados: más de una cuarta parte (26.6%) de las personas entre 18 y 29 años experimentaron síntomas de ansiedad. Y aproximadamente el 10% de estos pacientes calificaron su ansiedad como moderada o grave.
Las tendencias relacionadas con la depresión son similares. Casi el 30% de los jóvenes encuestados reportó sentirse deprimido en algún momento durante las dos semanas previas al sondeo (el 10% con síntomas moderados o graves), con tasas que disminuyen a medida que aumenta la edad. Entre los mayores, por ejemplo, la tasa fue del 18.6%.
Los motivos
El jefe del informe del CDC, Vivek Murthy, había advertido en 2021 sobre una "crisis" de salud mental entre los jóvenes estadounidenses.
"Las nuevas generaciones son bombardeadas con mensajes que erosionan su sentido de autoestima porque se les dice que no son lo suficientemente lindos, suficientemente populares, suficientemente inteligentes o suficientemente ricos", escribió Murthy. "Eso se produce cuando el progreso en temas legítimos y angustiantes como el cambio climático, la desigualdad de ingresos, la injusticia racial, la epidemia de opioides y la violencia armada parece demasiado lento", destacó.
Los nuevos datos de los CDC, basados en la Encuesta Nacional de Entrevistas de Salud de 2022, también muestran que las tasas de ansiedad y depresión aumentan a medida que los ingresos y la educación disminuyen. Por ejemplo, el 13.4% de las personas en el grupo de ingresos más altos reportaron sentirse ansiosas en las dos semanas anteriores al sondeo, en comparación con el 28.4% del grupo de ingresos más bajos.
Según los investigadores, los problemas de salud mental son trascendentes. "La salud mental y física están fuertemente vinculadas, ya que los adultos diagnosticados con afecciones de salud mental son más propensos a tener problemas de salud física y a una menor calidad de vida relacionada con la salud", cerró Murthy.
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