La plaza San Martín de Rosario se tiñó de rojo y blanco desde varios minutos antes del mediodía del sábado, que encontró al pueblo “santo” a mitad de camino entre Tucumán y la final ante Aldosivi, pactada para este domingo, a partir de las 15, en cancha de Rosario Central. Mientras que se espera la llegada de más de 20.000 personas, los que adelantaron el viaje llegaron a la hora señalada. La dirigencia había dispuesto llevar la tradicional ofrenda floral a los pies de la estatua del “Santo de la espada”, pero esta vez, a 950 kilómetros del punto de partida, en donde hace 115 años se fundó el club de Ciudadela.

La mañana había comenzado con el cielo nublado y bajo la amenaza latente de precipitaciones, algo que finalmente no ocurrió. Y como si fuese un capricho de la meteorología, las nubes comenzaron a disiparse, casi al mismo tiempo en el que llegaron las ofrendas rojas y blancas.

En el centro de la plaza, esta vez los miraba la estatua del General José de San Martín montado a caballo, pero con su brazo derecho en alto, levantando una bandera argentina.

Casi como emulando al prócer, que bien ganado tiene su bronce, al menos un centenar de simpatizantes, envueltos con los colores de San Martín, se reunieron en el centro del paseo, en un ambiente que poco a poco fue perdiendo la solemnidad.

“Merecemos estar hoy en Rosario para disputar el partido que venimos soñando hace mucho”, fueron las primeras palabras del presidente Rubén Moisello, que encabezó la breve ceremonia, que sirvió además para la primera concentración de hinchas, en la previa al partido del domingo ante Aldosivi. Lo acompañaron los vicepresidentes Bruno Sogno y León Kristal, además de Rodrigo Semrik, Gustavo Paz y Fernando Santillán, entro otros dirigentes y colaboradores. 

LA OFRENDA. Rubén Moisello y Bruno Sogno dejaron uno de los ramos de flores debajo de la estatua de San Martín. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ

El propio Moisello reconoció que, si bien no fue en el lugar donde se suelen celebrar los aniversarios del club, las razones valían más que el esfuerzo de haber cruzado medio país para estar ahí. “En estos 115 años, el destino nos trajo a un lugar, que no es el que acostumbramos. Tenemos la suerte y la dicha de estar aquí”.

Lo breve no quitó lo emotivo, ya que la ceremonia sirvió para que los hinchas suelten los primeros cantos de aliento para un equipo que los ha traído hasta Rosario, con la ilusión de quedarse con la final que los puede depositar, de nuevo, en la Liga Profesional.

Así fue entonces como al clásico “Ciudadela, Ciudadé…” le siguió la arenga para “la famosa banda” y el pedido de que “el domingo tenemos que ganar”, algo que imploran miles de “cirujas” a lo largo y ancho del país.

Para el cierre del encuentro, que duró poco más de media hora, los fanáticos desplegaron dos banderas para luego posar en una foto grupal que marcó el inicio oficial de las celebraciones por un nuevo aniversario de San Martín, que espera poder seguir de festejos este domingo en Rosario, y luego, sí, recorrer el camino de regreso, no sólo a Tucumán, sino también al fútbol grande.

EN TUCUMÁN. Hinchas y dirigentes del FOTO TOMADA DE X.COM/CASMOFICIAL

El homenaje también se hizo en Tucumán

Pese a que el grueso de la dirigencia se fue a Rosario, en barrio Sur, tres integrantes de la comisión cumplieron con la tradición de dejar una ofrenda en el monumento, ubicado a metros de la esquina de Lavalle y Ayacucho, que testimonia el lugar de la fundación del Club San Martín.

Ramiro Villa, Carolina Peralta y Maximiliano Plaza fueron los encargados del homenaje a los fundadores, que un 2 de noviembre de 1909, dieron los primeros pasos para la posterior creación de la institución "santa".