Cada uno de los inscriptos en la carrera tenía un objetivo personal por cumplir. Camila Borja Valor no fue la excepción. La niña de 7 años fue una de las participantes más jóvenes anotada en la categoría de los 3K participativos, pero va por mucho más: su sueño es competir en el triatlón.
Minutos antes de las 8.20, Camila arribó a las inmediaciones del parque 9 de Julio acompañada por Mariana Carrasco y por Juan Bolloi. A simple vista se trataba de una niña que completaría el recorrido junto a sus padres, pero la realidad es que Juan es su entrenador y Mariana, de 37 años, su compañera de grupo.
Según contaron, Camila se unió a comienzos de 2024 a un equipo que se prepara en las especialidades del triatlón: natación, ciclismo y carrera pedestre. Desde entonces ella ya participó en dos competencias de natación y en una de atletismo, en las cuales estuvo entre los cinco primeros lugares. “Estoy muy emocionada, me gusta mucho participar en estas carreras; sueño con poder correr y nadar”, dijo un poco tímida mientras escondía una parte de su cara detrás de Mariana.
Su compañera mayor también incursionó hace poco en el atletismo. “Esta es mi cuarta carrera, así que vamos a esforzarnos y a dar lo mejor de nosotras”, sostuvo. Su corta experiencia no le impidió a Mariana apoyar a Camila. “Siempre tratamos de que los más chicos participen en todas las pruebas en las que hay lugar para ellos. Nos parece muy importante y muy positivo que desde pequeños muestren interés y pasión por el deporte, sobre todo en una disciplina tan difícil como es competir en triatlones”, señaló.
“Es interesante, muy educativo y muy bueno que les den el lugar a los más chicos para que formen parte de esto, sobre todo a los que tienen la edad de Camila. Ayuda mucho a meterse en este mundo sano, dejar los celulares y la tecnología y directamente dedicarse al deporte, que es salud”, reflexionó Mariana.
Las participantes aprovecharon los minutos que les quedaban antes de iniciar la carrera para entrar en calor y hacer los ejercicios que les indicaba su entrenador. Una vez que anunciaron la largada, Camila y Mariana emprendieron el trayecto y estuvieron dentro del primer grupo de corredores de la distancia participativa que cruzaron la meta.