Los armadores de La Libertad Avanza (LLA) cuentan los votos en la Cámara de Diputados para evitar que la oposición insista con la Ley de Financiamiento Universitario, vetada esta semana por el presidente Javier Milei. Y mientras en el PRO comenzaron a surgir voces en contra de la decisión del Poder Ejecutivo Nacional (PEN), los tres jaldistas del bloque Independencia observarán de reojo y hasta el último minuto lo que suceda con los amarillos para definir su posición.

Tras la marcha federal del miércoles, el jefe de Estado firmó el decreto que frustró la puesta en vigencia de la iniciativa, impulsada por la Unión Cívica Radical (UCR) y apoyada por el peronismo de Unión por la Patria (UP). En los fundamentos del veto, Milei calificó el texto como “manifiestamente violatorio del marco jurídico vigente”, ya que “no contempla el impacto fiscal de la medida ni tampoco determina la fuente de su financiamiento”. Con ello, el proyecto regresó a la Cámara de origen, done había logrado la media sanción con 123 votos a favor, 91 en contra y 2 abstenciones.

Si los 257 diputados asisten a la próxima sesión, prevista para el miércoles 9, los libertarios necesitarán reunir 87 voluntades para frenar de manera definitiva este proyecto, que establece una inversión equivalente al 0,14% del PBI ($740.00 millones), según un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso.

Como LLA cuenta con 42 miembros, otra vez necesitará del acompañamiento de las bancadas aliadas para sostener la decisión del Presidente, tal como había sucedido semanas atrás con la -también vetada- ley de movilidad jubilatoria.

El bloque del PRO, que preside Cristian Ritondo, cumple un rol estratégico para el oficialismo, ya que sus 38 legisladores le permiten acercarse a los dos tercios requeridos para hacer frente a la oposición.

El problema para los armadores libertarios es que, en las últimas horas, el diputado Álvaro González, cercano a Horacio Rodríguez Larreta, anticipó su intención de votar a favor de la insistencia del proyecto de la UCR. “El gobierno se aferra a un dogma en lugar de tratar de resolver una situación”, afirmó González en una entrevista con Radio Mitre. Si bien remarcó que entiende la meta de “déficit cero” planteada por la Casa Rosada, consideró que “hay mecanismos en un presupuesto donde, si tenés voluntad política de resolver el problema, (podés) sacarle a algunos y ponerle a otros”. Además, el legislador del PRO incluyó críticas a Milei en sus redes sociales. “Vamos a insistir con la Ley de Financiamiento Universitario. La educación pública es un derecho.  No se puede gobernar mediante DNU y veto”, dijo González en X.

Nuevo escenario

El gobernador Osvaldo Jaldo recibió ayer en su despacho de la Casa de Gobierno a los diputados del bloque Independencia, Agustín “Tin” Fernández, Elia Fernández de Mansilla y Gladys Medina. Entre otros temas, se analizó la estrategia de cara a la sesión del miércoles. “Ya hice pública mi posición y realmente queremos un mayor presupuesto para las universidades, un mayor presupuesto para los sueldos de los docentes, para mejoras edilicias y para disponer de los elementos necesarios, tanto el profesor para enseñar como el alumno para aprender”, aseguró el titular del Poder Ejecutivo a la prensa. Más allá de esto, el tranqueño remarcó que “hay que ver cuál es el impacto financiero en el Presupuesto nacional o en el producto interno a nivel de la Nación”. Por ello, el mandatario tiene previsto viajar a Buenos Aires la semana próxima para interiorizarse sobre el contenido y los alcances de la propuesta.

En la previa, se daba por hecho que Jaldo les pediría a sus diputados que sostuvieran el apoyo al veto de Milei, una conjetura lógica por la postura dialoguista de Jaldo hacia la Casa Rosada. Sin embargo, fuentes de este bloque detallaron que, finalmente, la directiva pasó por “esperar” lo que suceda durante los próximos días, e incluso hasta último momento, para definir si bajarán o no al recinto de la Cámara baja para acompañar al oficialismo.

¿Qué cambió? Básicamente, los dichos del larretista González y la chance de que otros miembros de la bancada del PRO modifiquen su posición respecto a la Ley de Financiamiento Universitario.

En el bloque jaldista consideran que, si La Libertad Avanza no reúne el apoyo necesario por parte de su principal aliado en el Congreso, no tiene demasiado sentido que se coparticipe el costo político de una derrota parlamentaria.

En cambio, si los armadores libertarios consiguen a priori las adhesiones suficientes para disputar la votación a Unión por la Patria y a la UCR (la oposición debe reunir los dos tercios de los presentes), los diputados del bloque Independencia volverían a avalar el rechazo de los libertarios hacia el proyecto del radicalismo, tal como había sucedido cuando este asunto se trató por primera vez en la Cámara baja (salvo por Medina, ausente en aquella votación).

Por estas horas, al contrario de lo que había sucedido tras el decreto presidencial que puso un freno a la nueva la Ley de Movilidad Jubilatoria, en la Cámara de Diputados sostienen que hay un final abierto para la Ley de Financiamiento Universitario. Y con las tensiones en el PRO, se espera que el “poroteo” continúe hasta el momento de la sesión.