El jueves pasado por la tarde la policía de Islandia disparó a un inusual oso polar que se había presentado en las afueras de unas cabañas en un pueblo remoto del país. Los motivos del ataque a la especie en riesgo de extinción fueron expresados por las autoridades como una “posible amenaza”, lo que precisó aquel procedimiento.
El celacanto, el pez que se creyó extinto hace 60 millones de años y reapareció en una pequeña ciudad“No es algo que nos guste hacer”, comenzó relatando el jefe de policía de los Fiordos occidentales, Helgi Jensson. “Pero en este caso, como se puede ver en la imagen, el oso estaba muy cerca de una casa de veraneo. Había una mujer mayor dentro de esa vivienda”, expresó. Esta se había contactado vía enlance satelital con su hija que se encontraba en Reykjavik, la capital del país, para implorar su ayuda ya que la dueña se encontraba sola en casa. Esta había decidido encerrarse en el piso superior de su vivienda mientras el oso hurgaba la basura, según destaca el jefe de policía.
Un extraño oso apareció en una remota villa y provocó el pánico de una de sus habitantes
La mujer se encontraba sola en la villa ya que los residentes de las viviendas de veraneo ya habían abandonado sus casas. “Ella se quedó ahí, conocía el peligro”, agregó Jensson. Aunque los osos polares son especies protegidas en Islandia y a su vez está prohibido cualquier tipo de atentado contra su vida, el marco legal habilita su ejecución si estos representan una amenaza para los humanos o para el ganado animal que pueda encontrarse.
Sin embargo los ataques de osos polares contra los humanos son extremadamente raros con solo 73 registros de los mismos desde 1870 a 2014 en los países de Canadá, Groenlandia, Noruega, Rusia y los Estados Unidos, los cuales dejaron un saldo de 20 muertos y 63 heridos. No obstante, las alertas se han vuelto más frecuentes debido al calentamiento global.
El cambio climático, según un estudio publicado en Wildlife Society Bulletin en 2017, ha provocado que una mayor cantidad de osos hambrientos se hicieran presentes en las costas, incrementando las posibilidades de conflictos con los humanos y poniendo a ambos en riesgo. Así, 15 de los ataques del historial han ocurrido en los últimos cinco años.
El oso polar fue estudiado y su cuerpo podría formar parte de la colección del Instituto
Estos animales no son nativos de Islandia pero ocasionalmente se presentan en las costas consecuencia de los traslados en icebergs o masas flotantes de hielo desde Groenlandia, según explica la directora de colecciones científicas del Instituto de Historia Natural de Islandia, Anna Sveinsdóttir. Una gran cantidad de icebergs han sido avistados en la costa del norte en las últimas semanas, región donde se produjo este último incidente. El oso polar encontrado este jueves había sido el primero desde 2016, mientras que solo se registraron 600 observaciones en un período tan extenso que va desde el siglo IX hasta la actualidad.
El oso polar que pesaba 150 a 200 kilogramos fue llevado luego al Instituto para ser estudiado. Los científicos tomaron muestras del mismo, así como evaluaron la presencia de parásitos e infecciones y revisaron su condición física, la salud de sus órganos y su porcentaje de grasa, reveló Sveinsdóttir. Los especialsitas cosndieran preservar la piel y el cráneo como parte de la colección del instituto. Por otro lado trascendió que la mujer decidió prolongar su estadía en la villa luego de que el oso fuera removido.