Aunque la tecnología ya está disponible y es fundamental para mejorar la eficiencia y sostenibilidad del agro en el país, su adopción requiere tiempo, capacitación y un enfoque estratégico para que los productores puedan aprovecharla al máximo. Tal fue el mensaje final de un panel del BCR Agtech Forum, un encuentro organizado por la Bolsa de Comercio de Rosario que reunió a referentes del sector agroindustrial, a startup y a tecnologías.
Bajo el título “¿Cómo impactan las agtech en el agro? La visión de los productores”, Martín Rainaudo (Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa -Aapresid-), Gabriel Tinghitella (Consorcios Regionales de Experimentación Agropecuaria -CREA-) y Francisco Ghigo (Asociación de Cooperativas Argentina -ACA-) debatieron sobre la incidencia de las tecnologías agrícolas y las barreras que enfrentan las empresas agropecuarias para la adopción.
Rainaudo subrayó que, pese a la considerable inversión en maquinaria y tecnología, su uso no siempre es óptimo. “Muchos productores invierten en tecnología, pero no la utilizan en su máximo potencial. Nuestra startup trabaja para optimizar ese uso y que el productor pueda sacar el mayor provecho posible de las herramientas tecnológicas”, afirmó. Según dijo, la agricultura de precisión demostró ser beneficiosa, aunque aún se requieren esfuerzos significativos en capacitación y uso integral de estas herramientas.
Tinghitella explicó que solo un 2,5% de los productores son innovadores y un 13,5% adoptantes tempranos de tecnología. “El gran desafío es acelerar la difusión de la tecnología y establecer puentes entre innovadores y el resto de los productores”, destacó. Y enfatizó el papel crucial de las asociaciones en este proceso, facilitando el acceso a tecnologías probadas y adaptadas a diferentes perfiles de productores.
Ghigo identificó la relación costo-beneficio como un obstáculo principal para la adopción de las Agtech. “El costo de implementar tecnología no siempre se refleja en beneficios inmediatos. ACA trabaja en ensayos que demuestren el valor tangible de estas herramientas”, explicó. Ghigo también señaló la importancia de seleccionar adecuadamente a los productores para ensayar soluciones tecnológicas, asegurando que estén preparados para probarlas.
El panel también abordó la formación de talento. Los expertos coincidieron en que la rápida evolución tecnológica exige a las universidades adaptar sus programas educativos para alinearse con las necesidades del mercado. “Hoy no basta con tener conocimientos técnicos; los profesionales del agro deben trabajar en equipos multidisciplinarios para implementar soluciones tecnológicas con éxito”, afirmó Rainaudo.