DAMASCO, Siria.- La guerra que lleva adelante Israel en Medio Oriente ya parece parte de una conflagración internacional. Ayer, 18 personas murieron en una serie de bombardeos israelíes contra instalaciones militares en el centro de Siria, según las autoridades sirias. “El número de mártires de la agresión israelí ha llegado a 18”, dijo a la AFP el ministro de Salud sirio, Mohamad Al Ghabach, durante una visita a Masyaf, donde tuvieron lugar los ataques. Según el ministro, 37 personas resultaron heridas.
La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido pero que cuenta con una red de informadores en el país en guerra, reportó 26 muertos.
El director del OSDH, Rami Abdel Rahman, dijo que se trata de “uno de los ataques más violentos” llevados a cabo por la fuerza aérea israelí en Siria. El ejército israelí dijo a la agencia AFP que “no comentará informaciones de medios extranjeros”.
Desde el comienzo de la guerra civil en Siria, en 2011, Israel ha perpetrado cientos de ataques contra el ejército leal al presidente Bashar al Asad y los grupos proiraníes que lo apoyan.
Durante una visita supervisada por las autoridades sirias, los periodistas pudieron ver automóviles quemados y daños en la carretera que conduce a la ciudad de Masyaf.
Rahman dijo que los ataques tuvieron como objetivo “el centro de investigación científica de Masyaf y lugares circundantes”. Según él, este centro en el que trabajan expertos iraníes desarrolla armas, en particular misiles de precisión y drones. El OSDH dijo que los muertos son “cinco civiles, cuatro soldados sirios, 14 sirios que trabajaban para grupos proiraníes y tres víctimas no identificadas”.
Según la agencia de noticias siria, Sana, la aviación del “enemigo israelí” llevó a cabo ataques en la madrugada del lunes contra “varias instalaciones militares en la región central”.
En Irán, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Naser Kanani, condenó este “ataque criminal” que atribuyó a Israel.
El muy peligroso triángulo “Irán-Israel-Siria”Las incursiones israelíes en Siria se intensificaron tras el inicio de la guerra entre Israel y Hamás en Gaza, desencadenada por el ataque del movimiento palestino en suelo israelí del 7 de octubre.
Siria ha tratado alejarse de las tensiones en la región pero las incursiones israelíes con frecuencia apuntan a objetivos en Siria del Hezbolá libanés, un grupo proiraní, que se enfrenta con el ejército israelí desde el sur del Líbano.