Para mejorar la memoria y la concentración durante la temporada de exámenes, además de estudiar intensamente, es fundamental mantener un bienestar cerebral óptimo a través de una nutrición adecuada y hábitos saludables. Uma Naidoo, psiquiatra nutricional de Harvard, destaca que la vitamina B es especialmente beneficiosa para el funcionamiento cognitivo. Esta vitamina, en sus diversas formas, contribuye al metabolismo energético y al funcionamiento normal del sistema nervioso, apoyando así la memoria y la concentración.
Las vitaminas del complejo B desempeñan un papel crucial en la salud cerebral. La tiamina (B1), la riboflavina (B2), la niacina (B3), la vitamina B6, la biotina, y la cobalamina (B12) participan en procesos clave para el funcionamiento del sistema nervioso, incluyendo la síntesis de neurotransmisores y el metabolismo energético. Además, la vitamina C actúa como antioxidante y apoya la función cognitiva, mientras que otros nutrientes como el magnesio, DHA, potasio, yodo, y cobre también son esenciales para la salud del cerebro.
Uma Naidoo recomienda incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina B, como lentejas, garbanzos, nueces, espinacas, brócoli, lechuga, melón, fresas, pescados como atún y salmón, y carnes blancas como pollo y pavo. Estos alimentos aportan las vitaminas y nutrientes necesarios para mejorar la memoria y la concentración, especialmente durante períodos de alta demanda cognitiva como los exámenes.
Además de la nutrición, ciertos hábitos pueden potenciar la memoria y la concentración, como mantener una actividad física regular, participar en actividades que estimulen la mente (como crucigramas o aprender algo nuevo), organizar las tareas diarias, y dormir entre siete y nueve horas por noche. Una dieta balanceada, evitando alimentos altos en sodio, grasas saturadas y azúcares refinados, es también fundamental para mantener la salud cerebral y optimizar el rendimiento académico.