El reciente aumento en el precio de los combustibles generó preocupación entre los tucumanos, quienes se enfrentan a la difícil tarea de hacer frente a la creciente inflación y el constante encarecimiento de la vida diaria. En una recorrida de LA GACETA por distintas estaciones de servicio de San Miguel de Tucumán, varios vecinos compartieron sus opiniones sobre el impacto de este nuevo incremento en sus economías personales.
Miguel Ángel, uno de los conductores entrevistados, expresó su frustración: "Cada vez que venimos a cargar combustible, nos encontramos con la novedad de un aumento. Parece que todo está subiendo, y ya no nos sorprende. Lamentablemente, uno trae lo justo para cargar y ahora tiene que pagar más. Esta suba afecta a todos, especialmente a quienes, como yo, tenemos que cargar combustible constantemente para trabajar", dijo.
Nuevo aumento en los combustibles: ¿cuánto cuesta llenar el tanque en septiembre?Por su parte, Nahuel, otro vecino que utilizaba el vehículo de su trabajo, también comentó sobre la difícil situación: "Hay que meterle para adelante porque no queda de otra. El trabajador está acostumbrado a los aumentos, pero todo sigue siendo caro. Tengo una hija y me doy cuenta de que, aunque gane más, termino gastando más. No es el camino correcto, porque al final, uno trabaja y trabaja, pero no puede ahorrar nada. Ya no sabemos qué más hacer para llegar a fin de mes".
José, otro conductor, se enteró del aumento mientras esperaba para cargar combustible: "La verdad es que impacta en el bolsillo de todos. El aumento de los combustibles afecta el consumo familiar de todos los días. Aunque entiendo que estamos en un proceso, todos tenemos la esperanza de que esto mejore. La confianza de nosotros siempre está en Dios, que él va a ordenar las cosas para bien".
El aumento, que ronda el 3% en promedio, es parte de una devaluación programada y escalonada que el Ministerio de Economía ha implementado, conocida como "crawling peg". Este incremento, junto con el aumento en el impuesto a los combustibles líquidos, ha hecho que el precio de la nafta continúe en ascenso, afectando no solo a los bolsillos de los conductores, sino también al costo de vida en general.