Un nuevo estudio sugiere que recuperar horas de sueño durante los fines de semana podría tener un impacto significativo en la reducción del riesgo de enfermedades del corazón

Presentado en el congreso anual de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) en 2024, este estudio revela que las personas que logran compensar la falta de sueño durante la semana mediante un descanso prolongado el fin de semana pueden disminuir hasta en un 20% su probabilidad de desarrollar enfermedades cardíacas.

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Dirigido por un equipo de investigadores del State Key Laboratory of Infectious Disease en Pekín, el estudio analizó datos de más de 90.000 residentes del Reino Unido a lo largo de 14 años. Los resultados subrayan la importancia del sueño compensatorio, especialmente para aquellos que sufren de privación de sueño regular. 

Este hallazgo podría ofrecer una nueva perspectiva sobre cómo mitigar los efectos negativos de la falta de sueño en la salud cardiovascular y destaca la necesidad de priorizar un descanso adecuado en nuestras rutinas diarias.

¿Qué es el sueño compensatorio y qué beneficios tiene para la salud?

El sueño compensatorio es un concepto que se refiere al sueño adicional que una persona necesita o busca después de haber experimentado una privación de sueño. Esto puede ocurrir cuando alguien no ha dormido lo suficiente durante una o varias noches y, como resultado, su cuerpo intenta recuperar el descanso perdido en las noches siguientes.

Se caracteriza por un aumento en la duración del sueño y, a menudo, por una mayor cantidad de sueño profundo (fase de sueño de ondas lentas) y REM (movimiento ocular rápido). Estos son los períodos del sueño más reparadores y son los que más se necesitan después de la falta de sueño.

Los participantes con mayor cantidad de sueño compensatorio tuvieron un 19% menos de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas en comparación con aquellos con menos sueño compensatorio. En el subgrupo de participantes que se reportaron a sí mismos como privados de sueño (plantillas que dormían menos de siete horas por noche), aquellos con más sueño compensatorio redujeron su riesgo de desarrollar enfermedades del corazón en un 20%.

Cabe destacar que si bien los expertos reconocen los beneficios del sueño compensatorio, recomiendan que adultos duerman de siete a nueve horas cada noche para evitar la deuda de sueño.