Dos hombres ingresaron al Instituto Deportivo Carlos Pellegrini y sustrajeron un reflector y cuadernillos de Inglés de la institución. Ambos fueron detenidos a pocos metros cuando huían con las pertenencias. Estarán bajo prisión preventiva por los próximos 20 días.
El asalto ocurrió el pasado 28 de agosto, alrededor de las 3.40. Según la investigación realizada por la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos IV que conduce Diego Hevia, Adrián Federico Piovesan y Raúl Horacio Véliz para ingresar al establecimiento primero treparon por la tapia de tres metros de altura con alambres de púas. Una vez adentro, subieron por los escalones de la tribuna de la cancha de voley, de aproximadamente seis metros de altura, y treparon un pilar metálico para luego extraer un reflector LED y cuatro cuadernillos de Inglés. Al tener los bienes en su poder, huyeron del lugar pero fueron aprehendidos por personal policial a metros de la institución.
Por el hecho, la auxiliar de fiscal Natalia María Carabajal imputó a ambos de ser coautores del delito de tentativa de hurto agravado por escalamiento.
“Somos una fundación que brinda un servicio a la comunidad con más de 150 niños que practican actividades deportivas hace muchos años. Nos vimos perjudicados por numerosas sustracciones de reflectores y que están impidiendo la práctica federativa.Estamos como miembros de la sociedad y nos sentimos perjudicados por este hecho puntual y otros numerosos que sucedieron en la institución. Consideramos que los objetos sustraídos son de mucho valor y hay un esfuerzo muy grande de los papás para poder comprar los reflectores y para seguir practicando esta actividad”, manifestó el representante de la Fundación Educativa Y Deportiva Pellegrini, Hugo Veneziano. Además contó que el día anterior ya habían sufrido el robo de más reflectores.
Situación de calle
La representante del Ministerio Público Fiscal solicitó que los imputados fueran sometidos a prisión preventiva por los próximos 30 días para resguardar las medidas investigativas restantes. Al fundamentar el pedido de la medida de mayor intensidad explicó que Véliz vive en situación de calle por lo que no podría mantener arraigo y asegurar su sometimiento al proceso judicial. Respecto de Piovesan informó que el imputado ya contaba con una condena anterior de cumplimiento condicional por lo que su situación se agravaría. Además dijo que los acusados conocen la zona, por lo que podrían amedrentar a testigos y entorpecer la investigación.
La defensora oficial Marta Toledo (representante de Véliz) no se opuso a la medida propuesta. El representante de Piovesan, Julio Galup, se opuso a la preventiva y propuso que cumpla la medida de arresto domiciliario.
Finalmente el juez Sebastián Norniella Parache resolvió otorgar la preventiva para ambos pero por 20 días. Además le aclaró a Toledo que si lograban asentar un domicilio para Véliz existiría la posibilidad de morigerar la medida de coerción en su contra.