Nelson Ledesma se ilusiona con volver a codearse con los mejores del mundo. El golfista tucumano, que desde ayer está organizando su primer certamen en nuestra provincia, mostró un muy buen nivel en los últimos meses en el Korn Ferry Tour, el segundo certamen más importante de los Estados Unidos.
“Llegué el martes a la noche de Estados Unidos. Y la verdad que estoy contento, porque jugué bastante bien las últimas tres semanas en el Korn Ferry Tour”, contó el golfista de 34 años.
En la presente temporada, Ledesma lleva disputados 21 torneos, de los cuáles en 10 pasó a la ronda final. Su mejor actuación la consiguió en el UNC Health Championship presented by STITCH, que se jugó en Carolina del Norte, donde culminó en el tercer lugar, con 275 golpes, cinco bajo el par del Raleigh CC. “Finalicé a tres golpes del japónes Kaito Onishi, que fue el ganador, y a dos del estadounidense Max McGreevy, que fue el escolta”, reveló Nelson, que cuenta con dos triunfos en este circuito: el Lecom Health Challenge en 2018 y el TPC Colorado Championship at Heron Lakes en 2019. Además, en el Blue Cross and Blue Shield of Kansas Wichita Open, que se jugó en Kansas, finalizó sexto con 265 golpes, quedando a solo cuatro golpes del norteamericano Taylor Dickson, que fue el vencedor.
Otra buena actuación la consiguió en el Lecom Suncoast Classic de Florida, donde terminó en el puesto 20 con 270 golpes, a seis del sueco Tim Widing. Antes de volver al “Jardín de la República”, Ledesma compitió en el Albertsons Boise Open presented by Chevron, de Idaho, donde culminó en el vigésimo cuarto lugar, con 271 golpes, quedando a ocho del estadounidense Matt McCarty.
Motivado
“Tuve varios torneos muy buenos. Actualmente estoy en la posición 53 del certamen. Mi objetivo es quedar entre los 30 primeros para volver a jugar en el PGA Tour. Necesito jugar bien las últimas tres semanas. Estoy con muy buenas sensaciones. Me siento motivado. En un principio no tenía los objetivos muy claros, pero ahora sí. Empecé a sumar puntos y creo que estoy por el buen camino. No hay dudas de que la motivación principal es saber que estoy cerca del PGA Tour”, expresó.
Ledesma sueña con volver al circuito de golf más importante del mundo. “Si se llega a dar de nuevo, no puedo cometer los errores que tuve en 2020. No tengo que cambiar de palos, necesito hacer mi trabajo en forma paciente y esperar los resultados. Además, en esa época, me distraía mucho mirando a mis ídolos. No es fácil estar ahí y no mirar a golfistas que antes estabas acostumbrado a verlos solamente por televisión. Una vez, en un torneo, Tiger Woods iba adelante de mí. Era algo increíble. Compartir el vestuario y estar al lado de los mejores del mundo, en ese momento me jugó en contra. Creo que ahora estoy preparado de otra forma”, expresó.
“Siempre digo que jugar el PGA Tour es lo máximo a lo que puede aspirar cualquier golfista del mundo. Es como jugar el Mundial para un futbolista o en la NBA para un basquetbolista. El algo increíble, soñado”, dijo Nelson, que a los 12 años le dijo a su papá, David, que no quería seguir estudiando y que quería dedicarse de lleno al golf.
Ocho temporadas
“La verdad que nunca me imaginé estar jugando en Estados Unidos y ya llevo ocho años jugando allá. Lo que más me sorprendió del golf de ese país son los campos de golf, la indumentaria y la atención que nos brindan a los golfistas. La estructura del PGA es algo impresionante. Lo hacen todo en forma muy profesional. Y en ese nivel, somos todos iguales. A mí me brindan la misma atención que a Rory McIlroy, que es el N° 1 del mundo”, reveló Ledesma, que se convirtió en el segundo representante del “Jardín de la República” en llegar al más alto nivel del golf mundial, luego de Andrés “Pigu” Romero.
Desde ayer y hasta el domingo, se disputará la primera edición del Nelson Ledesma Invitational, el torneo de golf que tiene como anfitrión a “Muru” y que se juega en Las Yungas Country Golf. “Estamos a full con el torneo. La idea nació en Estados Unidos, mientras estaba de viaje. Iba de Texas a Carolina del Norte y un amigo me mandó un mensaje para decirme que organice un torneo antes del Abierto del Norte. Me pareció muy buen la idea y comencé ‘tirar’ mensajes. Les escribí a varios amigos, que me dijeron que le gustaba la idea y le di para adelante. Esto fue recién hace dos meses. Se organizó todo muy rápido. Como detalle, vale la pena aclarar que esa semana no venía jugando bien en el Korn Ferry y a partir de ahí mejoré. Fue como una gran inyección anímica que recibí”, contó el golfista nacido el 25 de julio de 1990 en Yerba Buena.
En la primera edición habrá golfistas de la talla del chaqueño Fabián Gómez, los cordobés Jorge Fernández Valdés y Miri Carranza, el santafesino Leandro Marelli, los bonaerenses Sergio Acevedo y Ariel Cañete, el uruguayo Juan Álvarez, el portorriqueño Armani Pérez Hernández, el paraguayo Gustavo Silvero y los locales “Pigu” Romero, César Costilla, Jorge Monroy y Augusto Núñez. “La idea es ver cómo sale y que se pueda disputar todos los años. Creo que este tipo de certámenes es muy importante para todos los golfistas que necesitan competencia. Además, el objetivo es que la cancha de Las Yungas vuelva a tener protagonismo y que sea como era hace 10 años”, agregó quien fue elegido por LA GACETA como el mejor deportista tucumano de 2019, también ganador del Olimpia de Plata en ese año.
Ausencia
Ledesma será una de las grandes ausencias que tendrá el 57° Abierto del Norte, que comenzará este fin de semana con la acción amateur para todas las categorías con un medal play a 54 hoyos, mientras que los profesionales tendrán acción la próxima semana. “No voy a poder estar presente. Vengo jugando siete semanas seguidas y necesito un poco de descanso. Además, justo el próximo fin de semana estoy viajando a los Estados Unidos”, contó el golfista, que el año pasado se consagró campeón del Abierto, por lo que no podrá defender la corona.
Nelson aprovechará estos días para disfrutar junto a su familia, principalmente con su esposa Eliana Otero y sus hijos Lorenzo y Justina. “Se extraña mucho Tucumán. Este año no fui con la familia, porque era todo incierto. Cuando mejor me sentía, estuve tres torneos sin pasar el corte. Está claro que para conseguir los objetivos hay que sacrificarse y mucha veces dejar cosas importantes de lado. A los jóvenes que se están iniciándose en este deporte les digo que sepan escuchar, que pregunten, que charlen con los golfistas más grandes y que pidan consejos, de cómo moverse en un campo de golf, de la ética de este deportes, del respeto que se debe tener al público y a los sponsors. Siempre hay cosas para aprender y mejorar”, concluyó Ledesma, que sueña con llegar nuevamente al PGA Tour.