Atrás quedaron la levadura y las harinas industriales a la hora de hacer el pan. Los procesos de fermentación natural ganaron terreno en los planes de alimentación porque son muy ventajosos para el organismo: mejoran la salud intestinal y previenen el envejecimiento celular. 

Se trata de la masa madre, una preparación que no es nueva sino que existe desde tiempos remotos pero que en los últimos año ganó popularidad porque cada vez más personas se inclinan por la nutrición consciente.

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La fórmula para crearla se genera a partir de la combinación de harina y agua que se fermenta de manera natural gracias a que genera bacterias y levaduras que le dan forma y consistencia.

Lo interesante de esta preparación es que no contiene aditivos químicos, que muchas veces se suelen usar en las mezclas tradicionales para que duren, pero que a larga pueden dañar la salud.

La masa madre es un especial aliado para aquellos que buscan bajar de peso, nivelar la glucosa en sangre y para los que son intolerantes al gluten.

La masa madre aporta múltiples beneficios para la salud del organismo La Voz

¿Qué beneficios aporta la masa madre a la salud?

Como el panificado de masa madre es un alimento totalmente natural y orgánico, los especialistas resaltan que ofrece múltiples beneficios. Su composición nutricional es de carácter noble. Media rebanada de pan contiene aproximadamente 160 calorías y 32 gramos de hidratos de carbono, un macronutriente que suministra energía y le da forma a los músculos.

En esta preparación, la fibra vegetal también está presente, en este caso en forma de prebióticos, microorganismos vivos que estimulan el crecimiento de las bacterias de la microbiota en el colon, y cuya función es favorecer la salud intestinal y mejorar la digestibilidad.

En este caso, media rebanada de pan, tiene entre dos y cuatro gramos de fibra. Según un informe de la Universidad de Harvard, una mujer adulta de hasta 50 años, necesita una ingesta diaria de 25 gramos de fibra y un hombre, 38 gramos.

Por lo tanto, se recomienda el consumo de alimentos a base de masa madre a las personas que necesitan bajar de peso ya que, la fibra genera saciedad por un largo período de tiempo, es decir que inhibe el apetito. En paralelo, los especialistas lo consideran ideal para las personas intolerantes al gluten ya que como el proceso de fermentación es más lento, descompone completamente los carbohidratos y el gluten.

A su vez, la presencia de micronutrientes cataloga a la masa madre como un panificado “estrella”. Es fuente de vitaminas del grupo B, que aportan energía, evitan la fatiga y el cansancio y actúan como antioxidante, por lo tanto previenen el envejecimiento de las células y los tejidos y potencian el sistema inmune y evitan el desarrollo de enfermedades crónicas, tumores e incluso resfríos.

Con respecto a los minerales, se destaca el potasio, que forma parte de la contracción muscular y que ayuda a mantener el ritmo cardíaco constante. Además, mejora la transmisión nerviosa y el funcionamiento de los riñones.

El hierro es otro de sus componentes: “Se trata de un nutriente que transporta y almacena el oxígeno en el cuerpo y participa en la constitución de la hemoglobina, que son los glóbulos rojos”, menciona Gabriel Crincoli, licenciado en Nutrición y miembro del equipo de cirugía bariátrica y metabólica del Hospital Fundación Favaloro (M.N: 1645).

A esta lista también se suma el calcio, esencial para “fortificar y mantener vitales los huesos y dientes”, dice Crincoli y agrega que a su vez, este nutriente colabora en la contracción muscular y en la circulación de la sangre a través de los vasos sanguíneos.

Los especialistas destacan que también aloja magnesio, un componente que regula y equilibra el correcto funcionamiento del sistema nervioso y que participa en la formación de proteínas. Por último contiene zinc, que se encarga de fortalecer el sistema inmune, forma parte del crecimiento de las células y cicatriza heridas.