La variada propuesta de actividades deportivas en el campo amateur tiene en una iniciativa provincial un valor distinto, porque incluye a chicos en edad escolar. Se trata de los Juegos Estudiantiles Tucumán, una competencia multidisciplinaria que está reuniendo a miles de alumnos de toda nuestra geografía. El tenor de la propuesta, que se extenderá hasta noviembre, se palpa en la cantidad de escuelas que participan: 1.779. Y en consecuencia, en la cifra de participantes: cerca de 5.000. Los juegos se extienden a los 19 municipios de la provincia, y a las 93 comunas rurales.

Son 16 las disciplinas en competencia en un certamen, con propuestas variadas, tales como ajedrez, atletismo, básquet 3x3, cestoball, futsal, gimnasia, hockey, handball, natación, rugby (tocata), sóftbol, tenis y vóley.

Se trata del encuentro deportivo-recreativo más importante que se desarrolla entre instituciones  educativas en Tucumán. Persigue, por intermedio de la competencia, desarrollar el trabajo en equipo, el aprendizaje a través del juego y la conciencia corporal. Además, busca explorar los beneficios que el deporte aporta a la vida de los jóvenes.

Un valor agregado es fomentar la asistencia a la escuela y hacer que los chicos tengan ganas de ir a los establecimientos  educativos. Esto, según se sostiene desde el Ministerio de Educación, no sólo es mérito de los Juegos Estudiantiles, sino también del programa de Coro y Orquestas, y de la jornada extendida.

En el caso de la propuesta que fomenta la actividad física, son cuatro meses llenos de actividades, bajo la idea de considerar al deporte y a la cultura como un derecho.

Estos Juegos se estructuran en tres etapas. La primera es la institucional, que se lleva a cabo en cada escuela. Luego viene la zonal, que representa la actividad a nivel municipal. Y finalmente se llegará a las finales provinciales, en las que competirán los mejores equipos de tres categorías: Cadetes, Menores y Juveniles.

Un aspecto importante es que la competencia se divide en tres modalidades. Por un lado están los llamados “Juegos Motores”, destinados a los estudiantes de nivel Inicial y Primario. La intención es fundamentalmente enseñarles a los más chicos a través del juego y la actividad física. La segunda modalidad se denomina “Juegos para Secundaria”. Sus fines son el fomento del desarrollo de habilidades y el trabajo en equipo. Y están también los llamados “Juegos Adaptados”, inclusivos y alimentados por el ideal de que todos los estudiantes tengan la posibilidad de participar.

En tiempos que no resultan sencillos para niños y jóvenes en general, resulta de vital importancia sostener este tipo de propuestas. Queda a la vista que educa en lo atinente al cumplimiento de las reglas y genera un sentido de competencia sana, justamente en una etapa formativa de los participantes. Esto fortalece la idea del deporte como un gran formador de valores que hacen a la convivencia. Y también como un motivador para poder proyectarse a otros planos, desarrollando habilidades que serán de utilidad a lo largo de la vida.