El boxeo femenino fue la disciplina más polémica de los Juegos Olímpicos de París 2024. El caso de Imane Khelif desató un debate dentro de la cita olímpica, aunque no fue la única situación con dichas características: Lin yu Ting, pugilista taiwanesa, posee más hormonas masculinas de lo normal lo que muchos alegan que le da “ventaja deportiva” sobre sus rivales.
La boxeadora, de 29 años, tiene una condición genética que se denomina hiperandrogenismo, un caso similar al de la argelina, que porta los cromosomas XY y una mayor cantidad de andrógenos (hormonas masculinas). Frente a la constante discriminación, la pugilista decidió cerrar sus redes sociales: “Quiero darle las gracias a todos los que me apoyan en Taiwán. Recibí muchos mensajes de apoyo. No los leí porque apagué mis redes sociales. Voy a llevar esta fuerza hasta el final”, señaló, quien ya se encuentra en semifinales y, por ende, tiene medalla asegurada.
Ling yu Ting peleó un día después de que Khelif derrotará a la italiana Ángela Carini en 46 segundos. La taiwanesa, por su parte, superó a la búlgara Svetlana Staneva en tres rounds. No obstante, el Comité Olímpico Internacional lanzó un comunicado para respaldarla. “Todos los deportistas que participan del torneo de boxeo cumplen con las normas de elegibilidad y de inscripción de la competición, así como con todas las normas médicas aplicables establecidas por la Unidad de Boxeo de París 2024 (PBU)”, explicaron desde la organización.
El polémico gesto de la rival de Lin Yu Ting tras perder
Tras caer en los cuartos de final, la búlgara Staneva rechazó el apretón de manos de Lin Yu Tang, a modo de protesta por su participación, y realizó una cruz con sus dedos después de señalarse. “Tengo cromosomas X”, indicó.