No es para nada extraño que los clubes de fútbol tengan deudas económicas. Y aunque en la mayoría de los casos, luego de un tiempo, se terminan saldando, en otras ocasiones se vuelven impagables. Esto le sucedió a un histórico club europeo, que tomó la drástica decisión de abandonar el fútbol profesional.

El Girondins de Burdeos, equipo que logró seis títulos de liga francesa en su historia, y que supo contar con grandes nombres en su plantel, como Zinedine Zidane, fue la institución que debió retirarse de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), al no poder afrontar una deuda de 42 millones de euros.

“El club tuvo que desistir de solicitar el mantenimiento de su estatus profesional (...). Es una decisión difícil que anticipa una consecuencia inevitable del proceso de reestructuración en curso. Aunque el centro de entrenamiento cerrará como consecuencia de ello, el club seguirá promocionando equipos juveniles”, comunicó el club en sus redes.

De esta forma, el Burdeos, que ya había sido descendido a tercera división por sus complicaciones económicas, no competirá en ninguna liga en la próxima temporada. Todos sus jugadores fueron liberados, y son agente libre.

“El esfuerzo de transparencia ante las autoridades del fútbol francés sobre cuál será la situación real del Club en los próximos días y semanas debe permitir, en particular, limitar las consecuencias deportivas de esta situación, teniendo el Club el objetivo de evolucionar en la Nacional 1 la próxima temporada, para permitir, lo antes posible, el regreso del Club, con las finanzas saneadas y una ambición renovada, al más alto nivel”, cierra el comunicado del club.