El té de romero es una infusión popular por sus múltiples beneficios para la salud. Entre ellos, mejora la digestión, reduce el estrés y la ansiedad, previene enfermedades del corazón, estimula el crecimiento del cabello y es rico en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios.

Tomar té de romero por la noche puede ayudar a relajarse, reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño, gracias a sus propiedades sedantes. Sin embargo, se debe consumir con moderación para evitar efectos secundarios como dolor de cabeza o mareos. Además, el té de romero mejora la digestión, actúa como antibiótico natural, es un buen diurético, combate el cansancio mental, purifica el hígado y ayuda a controlar la diabetes.

Para preparar el té, se hierve agua y se añaden hojas secas de romero, dejándolas reposar antes de consumir. Es importante consultar a un profesional de la salud antes de añadirlo a la dieta, especialmente en el caso de mujeres embarazadas o personas con enfermedades hepáticas. Además, algunas personas pueden ser alérgicas al romero.

No hay un tiempo específico recomendado para consumir té de romero, pero se sugiere 1-3 tazas al día. Aunque es beneficioso, debe evitarse en grandes cantidades durante el embarazo, la lactancia y en personas con hipertensión.