Tras una reunión de última hora realizada el miércoles en el Juzgado Federal de Goya, la jueza Cristina Pozzer Penzo, que investiga la desaparición de Loan Danilo Peña (5 años) le ordenó al Comando Unificado averiguar cada detalle sobre el entorno de las personas que participaron del almuerzo previo a la desaparición del niño. El comando fue conformado por la ministra de Seguridad nacional Patricia Bullrich y puesto a disposición de la jueza federal, lo conforman efectivos de la Policía Federal, Gendarmería, Policía de Seguridad Aeroportuaria y Prefectura Naval. Dirigidos por el comisario Fabio Pirrone, deberán realizar un “perfilado del núcleo familiar” de cada una de las personas que asistieron el 13 de junio a la casa de Catalina Peña, la abuela de Loan, en un campo cercano a 9 de Julio (Corrientes). Ese día se vio por última vez al niño.
El objetivo de Pozzer Penzo es “determinar el núcleo familiar, amistades e identificar con cuáles (de los sospechosos) ha mantenido relaciones afectivas el menor, su grupo directo y/o cercano (conflictivas o no), quienes integran sus grupos o vínculos sociales y/o deportivos, curriculares, etcétera”, según se explica en el escrito de nueve páginas al que accedió La Nación y en el cual dejó plasmada su orden.
Conocer todo ese contexto podría ayudar a los investigadores, principalmente a esclarecer el hecho, pero también de manera subsidiaria, evitar llegar a conclusiones equivocadas con respecto a algunos imputados. Cabe aclarar que toda la información recabada con esa medida se plasmará en un informe que constituye una prueba, pero no de peso determinante (para condenar).
Medidas presenciales
Pozzer Penzo solicitó que las medidas, que serán aplicadas por psicólogos, trabajadores sociales y personal especializado en el área, sean realizadas de manera presencial, por lo que los profesionales deberán visitar a los detenidos en sus celdas y a los testigos y demás potenciales sospechosos en sus casas. Estudiar el entorno del pequeño Loan incluiría también averiguar quiénes eran sus maestros en el jardín y con quiénes se relacionaba en la escuela.
Los investigadores telemáticos también deberán recabar todo lo que puedan de las redes sociales de las personas a las que alcance la medida.
Caso Loan: Benítez declaró que la policía correntina le pidió que culpe a alguienA su vez, se revisará sus cuentas bancarias para conocer los movimientos que hicieron en los últimos meses para elaborar también un “perfil económico”. Según el escrito, eso incluye: “gastos, compras extraordinarias, movimientos bancarios o de otro tipo que la persona pudo realizar, uso de billeteras virtuales, bancos, consulta a AFIP sobre si se registra el grupo familiar, cercanos o imputados/as registrados y los empleos por los cuales haya realizado aportes previsionales”.
Otra de las órdenes que dio la jueza federal fue respecto a dos personas que fueron mencionadas por Laudelina Peña, tía de Loan y una de los ocho detenidos. Pozzer Penzo ordenó localizar al abogado José Codazzi, ex defensor de Laudelina.
Amenazas
Según la mujer el profesional la amenazó para que mintiera en su primera declaración. La magistrada quiere que se le notifique que se le relevó el secreto profesional, por lo que probablemente será llamado a declarar. El otro hombre que quedó en la mira de la Justicia es el senador correntino Diego Pellegrini. Días atrás se ofició requiriendo la presencia del parlamentario, pero hasta el momento no tuvo respuesta, por lo que anoche se envió una nueva notificación. Pellegrini fue mencionado por Laudelina como otra de las personas que la habrían presionado para que mintiera. También llamaría a declarar a Rafael Miranda, chofer del senador.
Además de Laudelina, están detenidos en la causa: su pareja Bernardino Benítez, Daniel Ramírez, Mónica Millapi, Amado Méndez, Carlos Pérez, María Victoria Caillava y Walter Maciel; todos por la sustracción del menor o el encubrimiento del hecho.
Cambios en la Policía
La desaparición de Loan generó un terremoto político en Corrientes. Esta semana, el gobernador Gustavo Valdés comenzó a realizar cambios para intentar mejorar su imagen. Primero removió a Buenaventura Duarte del ministerio de Seguridad y nombró a Alfredo Vallejos al frente de esa cartera. Ayer decidió continuar el barrido y destituyó al jefe de Policía Arnaldo Molina y a toda la cúpula policial. Llamativamente, el mandatario pretendió nombrar a un comisario con causas penales abiertas, situación que fue denunciada por una legisladora, que consiguió que se frustrara ese ascenso. Finalmente, Valdés terminó designando a Miguel Ángel Leguizamón como jefe de la Fuerza, y a Walter Aceval como subjefe.