La Selección consiguió el bicampeonato en la Copa América y no quedan dudas de que con el trofeo bajo el brazo, el desarrollo del juego quedará en segundo plano. No obstante, hay varios aspectos para resaltar del partido que planteó Lionel Scaloni contra la Colombia de Néstor Lorenzo.

Por el contexto y por toda su jerarquía, Ángel Di María era uno de los primeros en asegurarse un lugar en el “11” titular. “Fideo”, que convirtió en la finales de la Copa América 2021, en la Finalísima y en el Mundial de Qatar 2022, volvió a ser parte del esquema de Scaloni. Por obvias razones, quien también mantuvo su puesto fue Lionel Messi.

Si bien Scaloni tenía la posibilidad de dar la sorpresa con la formación, nuevamente utilizó un 4-4-2 y repitió el mismo equipo que había vencido en semifinales a Canadá.

Emiliano “Dibu” Martínez en el arco como una fija y con una defensa compuesta por Gonzalo Montiel, Cristian “Cuti” Romero, Lisandro Martínez y Nicolás Tagliafico. En tanto que la mitad de la cancha quedó compuesta por el siempre cumplidor Rodrigo De Paul, Enzo Fernández -que se retrasó unos metros como cinco de contención-, Alexis Mac Allister y Di María.

James Rodríguez, que venía siendo la figura del torneo, no logró superar al medio campo “albiceleste”. Para colmo en el alargue, entraron Leandro Paredes y Giovani Lo Celso para aportar frescura a un sector que fue de menor a mayor.

En el ataque, Julián Álvarez se ganó el puesto que venía siendo bien resguardado por Lautaro Martínez, y acompañó a Messi. Claro, de Lautaro se hablará más adelante.

A pesar de que los nombres en la previa intuían una amplia superioridad ante Colombia, esto no ocurrió ni mucho menos. Con un 4-2-3-1, la selección “cafetera” salió a proponer.

A pesar de que Álvarez tuvo la primera de peligro, los de Lorenzo respondieron con un remate de Luis Díaz y un cabezazo de Carlos Cuesta, a través de un córner. Claro, el fuerte de la “tricolor” en este certamen fue la altura de sus jugadores en las jugadas de balón detenido; método que le otorgó cinco tantos en la Copa.

En ese aspecto, el equipo de Scaloni se mostró firme. “Licha” Martínez ganó todo en el juego aéreo. Si bien ya había sido un dolor de cabeza solucionar la eficacia de Colombia en la pelota parada, peor fue encontrar un reemplazante ante la lesión de Messi. Pero, Scaloni volvió a acertar. Se decidió por Nicolás González y respondió con creces. Tuvo un potente cabezazo que se fue besando el segundo palo y un peligroso remate que terminó en las manos de Camilo Vargas.

Los últimos aciertos de Scaloni fueron dos; y uno de ellos le sirvió para ser campeón. Primero, mantuvo a De Paul (pese a su cansancio) y el ingreso de “Toro”. El goleador de la Copa América sumó uno más a su cuenta personal; esta vez, para traer la Copa a casa.