A pesar de algunas sonrisas típicas de un entrenamiento, en San Martín todavía quedan secuelas del duro golpe que le propinó Ferro. En la jornada de atención a la prensa semanal previa al duelo contra San Miguel, la mayoría de los futbolistas optó por el silencio. Sólo Diego Flores, Darío Sand y Lucas Diarte, la última incorporación del mercado de pases, le pusieron el pecho a la situación.
“Están listos para el partido pero obviamente golpeados en lo anímico por lo que sucedió”, le confió un integrante del cuerpo técnico a LA GACETA sobre el estado de ánimo del grupo y la necesidad de volver a sumar de a tres para recuperar la sonrisa. El partido contra el “trueno verde” será una especie de final ya que ese resultado podría definir varios puntos en Bolívar y Pellegrini.
Con dudas respecto al “11” titular y con los cambios guardados bajo siete llaves, Flores dejó en claro que no hay margen para el error. “Los jugadores saben en el club en el que estamos, que acá se te exige todo el tiempo. En San Martín lo que manda son los resultados, entonces si vos ganás, dos, tres o cuatro partidos seguidos como nos ha pasado en una etapa, te empezás a separar un poco”, dijo Flores intentando salir en defensa de sus pupilos.
Si bien hay chances de que repita el mismo equipo que cayó en Caballito, deberá evaluar a fondo la situación de Juan Orellana. El zaguero central tiene una inflamación en la zona de la rodilla y completar los 90 minutos contra San Miguel podría significar un riesgo. No obstante, todo indica que la dupla con Agustín Dattola se repetiría nuevamente.
En tanto Máximo Levi, central que llegó proveniente del fútbol israelí, todavía no está al 100% y se quedaría afuera de la lista de convocados para este duelo.
Con Darío Sand como una fija desde el inicio del torneo, las principales dudas de Flores estarán en los laterales. Gonzalo Bettini podría repetir en la formación, mientras que por la izquierda empieza el debate.
Si bien Diarte está con ganas de volver a jugar en La Ciudadela, su presencia es una incógnita según lo que dijo el entrenador. “Todavía no terminó la semana. Lo veo bien, es un jugador que tiene un nivel muy alto de entrenamiento, pero viene con poco rodaje. Eso sí, tiene el plus de conocer la cancha y eso lo va a ayudar si es que le toca entrar”, explicó.
“Estoy bien. En Perú estábamos de pretemporada e hicimos algunos partidos amistosos. Estoy conociendo a mis nuevos compañeros y la forma de entrenar que tiene este cuerpo técnico. Espero estar a disposición”, se postuló el defensor.
Más allá del deseo del futbolista de tener su reencuentro con los hinchas, actualmente hay un jugador en ese puesto y es Diego Mastrángelo. Si bien el ex Gimnasia de La Plata no tuvo una buena actuación contra el “verdolaga”, podría seguir de titular, al menos, un partido más.
En el medio y en el ataque todo seguiría igual. A diferencia de otras ocasiones, no hay ningún futbolista con problemas en lo físico y Flores no movería mucho el equipo.
La última vez que había transitado una situación similar, en la que necesitaba salir de una adversidad, Flores había apostado por los referentes: Sand, Orellana, Pablo Hernández y Gonzalo Rodríguez. Luego de que el “santo” quedara eliminado de la Copa Argentina, el entrenador puso a eso futbolistas en cancha y la jugada le funcionó (el “santo” le ganó 2-0 a Patronato).
Pero con los nombres no alcanza y eso quedó demostrado en las últimas fechas. El “santo” necesitará recuperar la confianza para volver a ganar ante su gente, que le reclama mejor juego y contundencia. A esos dos aspectos están abocados Flores y compañía, tratando de dejar atrás una semana que fue para el olvido.