El futuro y el pasado de la historia espacial se unen en el Centro Lyndon B. Johnson de la NASA en Houston. Es la casa de las estrellas, literalmente, diferente al NRG Stadium que el jueves será el hogar de los astros de carne y hueso en una de las semifinales de la Copa América.

El Space Center Johnson recibe a un millón de visitantes anualmente en sus instalaciones de más de 23.000 pies cuadrados.

Desde 1992 se puede disfrutar de los paseos y las atracciones con más de 400 objetos espaciales, cuidadosamente combinados para que las experiencias atraigan a los adultos y a los niños. Naves espaciales, rocas lunares y contacto con astronautas son algunas de las opciones de entretenimiento.

También hay chances de pernoctar. Precisamente, este sábado, se realizará la “Noche en familia-Día de la Independencia”. Desde esa tarde y hasta el día siguiente, los visitantes harán base con sus carpas bajo un cohete Falcon 9. De ahí en más comenzarán a recorrer las atracciones del lugar donde se entrenan los astronautas.

El recorrido en el tranvía al aire libre del Centro Espacial de Houston es la atracción más popular ya que permite desplazarse a diferentes lugares. El paseo está incluido en el precio de cualquier entrada y lleva a los visitantes a mirar el enorme cohete Saturn V, el más poderoso jamás construido.

Otro de los grandes atractivos es la visita al histórico Centro de Control de las Misiones Apolo, desde donde se dirigieron las misiones Géminis y Apolo, incluyendo la misión 11 que en 1969 llevó a los primeros humanos a la Luna.

Además podrán entrar a la aeronave original NASA 905, portadora de transbordadores espaciales y a una réplica de uno de ellos instaladas en la parte superior. Está en el espacio “Independence Plaza”, una exhibición gigantesca de ocho pisos de altura.

Llegar a Marte es una meta de la NASA. Con la exposición “Mission Mars”, los visitantes se acercan mucho a lo que ya se conoce del planeta y pueden tener una noción clara de la planificación que se realiza para cumplir con tan ambiciosa meta. Una variedad de actividades transportará a los visitantes al paisaje marciano, con un muro de realidad virtual, pronósticos meteorológicos en tiempo real y un meteorito de Marte que los huéspedes pueden tocar. Conocerán también qué naves espaciales nos llevarán al cuarto planeta del sistema solar y cómo los humanos pueden vivir en el “Planeta Rojo” en las próximas década.

Las experiencias inmersivas son cada vez más populares en todo el mundo. El montaje de ellas genera tanta intensidad que los participantes se sienten como si estuvieran viviendo una realidad. Eso genera el “Stellar Science Show”, un programa que permite a los invitados convertirse en científicos de cohetes a través de experimentos interactivos realizados por un miembro de la tripulación del centro.

En uno de los cinco pisos del Teatro del Centro Espacial se pueden disfrutar de emocionantes películas en el cine 4K que cuenta con lo último en tecnología de audio y video.  La resolución ultra alta de la pantalla digital la convierte en una de las de mayor calidad disponibles en la actualidad. El sistema de audio tuvo una mejora enorme gracias al mecanismo envolvente Dolby de última generación.

Con la experiencia VIP, el visitante accede a información detallada y visitas a varios edificios del Centro que no están incluidos en la entrada general. El tour VIP tiene un cupo de 10 participantes. La edad mínima es de 14 años y dura unas cinco horas, con un conductor y un guía personal. La visita al “Centro de control de misiones” y el “Entrenamiento de astronautas” tienen el rango de VIP, con un costo de U$S 195,95. También en ese segmento entra el “Desayuno con un astronauta” al que se puede acceder por  U$S 99,95 y U$S 79,95 (niños y adultos) respectivamente.  

La entrada general, comprando on-line, cuesta U$S 29,95 para adultos y 24,95 para niños (4 a 11 años); en tanto que los menores de 3 entran gratis. Los mayores de 65 años o más pagan U$S 27,95.