Los toppings dan un plus a las meriendas y pueden ser tan variados como permita la imaginación. Los dulces y mermeladas, sin dudas, deben estar presentes en estas comidas. Pero no hay necesidad de que sean demasiado empalagosos ni generen daño al organismo. Por eso siempre son una buena opción las recetas sin azúcar.

Mermelada de naranja casera: una receta tucumana para el invierno

Hay una mística detrás de las mermeladas según la cual solo las abuelas tienen el poder de prepararlas de la forma correcta. Pero gracias a internet -y sin desmerecer los logros de las manos de las más sabias-, hay miles de tips para preparar los mejores dulces de las formas más saludables posible.

Mermelada de frutilla sin azúcar

Ingredientes

- 250 gramos de frutillas frescas

- Stevia

- 1/4 de una naranja

- Canela

Preparación

1. Lavar las frutillas, quitarles las hojas, los ramitos y la parte superior blanca. Cortarlas en pedacitos. Mientras más pequeños sean, más rápido se hará diluirá la fruta.

2. Cortar un cuarto de una naranja, pelarlo y asegurarse de quitar incluso la parte blanca que se encuentra entre la fruta y la cáscara. Este paso evita que la preparación quede con un sabor amargo.

3. Pasar las frutillas a una olla a fuego máximo y agregar el cuarto de naranja.

4. Revolver para lograr que la frutilla libere naturalmente el azúcar y el jugo que contiene.

5. Una vez que las frutillas empiecen a verse tostadas, bajar el fuego a su capacidad mínima. Dejar cocer y revolver cada algunos minutos para evitar que se pegue.

6. Revolver lo suficiente hasta que la fruta tome la consistencia de una mermelada. Algunos prefieren dejar los pedazos de fruta y otros prefieren esperar a que se diluyan lo suficiente.

7. Agregar una pizca de canela y dos cucharaditas de stevia. Probar para aseguarse de que esté lo suficientemente endulzada según el gusto de cada paladar.