El budín de espinaca es una deliciosa y nutritiva opción culinaria que combina la suavidad de un budín con los beneficios saludables de la espinaca. Rica en vitaminas A, C, E, K y del complejo B, y en minerales como calcio, hierro, potasio, magnesio, manganeso y fósforo, esta verdura es también una excelente fuente de proteínas y fibras.
Este plato versátil puede disfrutarse tanto caliente como frío, haciéndolo ideal para cualquier época del año. Puede servir como plato principal o como acompañamiento y es fácil de adaptar con otros ingredientes como mozzarella, jamón, zanahoria o calabaza.
Cinco opciones para comer espinaca y aumentar la masa muscular¿Cómo preparar el budín de espinaca?
Ingredientes
2 atados de espinaca cocidos y escurridos o 400 g de espinaca congelada
2 cebollas picadas finamente
1/2 pimiento
1 zanahoria rallada
4 huevos
Condimentos al gusto (sal, pimienta, nuez moscada)
Para el relleno:
100/150 g de queso fresco o mozzarella
Preparación
Preparar la espinaca:
Lava bien las hojas de espinaca, separando las partes no aptas.
Cocina las espinacas en agua con sal hasta que estén tiernas. Luego, cuélalas y enfríalas antes de picarlas finamente. Si usas espinaca congelada, asegúrate de descongelarla y escurrirla bien.
Saltear las verduras:
Pica la cebolla, la zanahoria y el pimiento.
Saltéalos en una sartén con un poco de aceite, añadiendo sal y condimentos al gusto.
Mezclar los ingredientes:
Añade la espinaca y una cucharada de queso crema a las verduras salteadas para obtener una consistencia más cremosa.
En un recipiente aparte, bate los huevos ligeramente y mezcla con la preparación anterior.
Montar y cocinar:
Precalienta el horno a 180 °C.
Enmanteca una budinera y vierte la mitad de la mezcla.
Coloca el queso mozzarella o fresco en el centro y luego añade el resto de la mezcla.
Hornea durante aproximadamente 40 minutos o hasta que, al introducir un cuchillo, este salga limpio.
Desmoldar y servir:
Deja que el budín se entibie antes de desmoldarlo para evitar que se rompa.