En épocas donde la tecnología es la compañera de adultos y chicos, los profesionales de la salud recomiendan no abandonar la tradicional escritura a mano por los numerosos beneficios que ofrece a nuestra memoria. Además, los especialistas señalan que esto facilita el aprendizaje de los niños.
Alzheimer: ¿cuáles son las señales de alerta más allá de la pérdida de memoria?La escritura manual es una práctica importante que trae gran provecho para la prevención de enfermedades que afectan el cerebro y el desarrollo cognitivo y de la imaginación. Lo digital puede ser eficiente, pero lo analógico ayuda a nuestro cerebro a preservarse del envejecimiento.
La escritura existe hace miles de años y, desde entonces, fue una herramienta fundamental para el registro de la historia. Esta, además, estimula diferentes áreas del cerebro, afianza la creatividad y desarrolla la comprensión.
Sin embargo, los múltiples beneficios del acto de escribir pueden variar según la forma en que se ejecute. No tiene los mismos resultados si lo hacés con lapicera y papel que si lo hacés con un teclado y una pantalla, donde no hay necesidad de dibujar los trazos. Con la escritura manual tu mente y cuerpo reciben un impacto positivo mucho más provechoso.
Los siete beneficios de escribir a mano
Estimula la memoria
El trazo a mano te permite recordar de manera más fácil y rápida lo que ponés en papel. Así lo plantea un estudio de la Universidad de Tokio, publicado en la revista académica Frontier in Behavioral Neuroscience.
De acuerdo con la investigación, los voluntarios que tomaron nota en papel, en lugar de utilizar dispositivos digitales, “tuvieron más actividad cerebral en las áreas asociadas con el lenguaje, la visualización imaginaria y el hipocampo, una zona importante para la memoria”.
Mejora el aprendizaje
Las personas asimilan mejor lo que transcriben. Esto implica mayor ejercicio de las partes sensomotoras del cerebro, por lo que hay más oportunidades de alojar información. Lo ideal es que los niños aprendan primero a escribir a mano y después a digitar.
Según la neurocientífica Claudia Aguirre, en un artículo publicado en la revista Forbes, “investigaciones recientes han descubierto una vía neuronal distinta que solo se activa cuando dibujamos físicamente nuestras letras. Y este camino, grabado profundamente con la práctica, está vinculado a nuestro éxito general en el aprendizaje y la memoria”.
Previene el envejecimiento mental
La escritura, al igual que llenar crucigramas o armar rompecabezas, estimula la actividad neuronal y previene o retrasa la aparición de enfermedades de deterioro cognitivo, como el alzhéimer o la demencia senil.
Mejora la motricidad fina
Hay una mejora en la organización espacial y coordinación visomotora ojo-mano. Esto es clave en los niños de cuatro a seis años y tiene relación con las habilidades de manipulación manual, que incluyen la precisión de los movimientos de las manos y los dedos, según el estudio "El efecto de la motricidad fina en la legibilidad de la escritura", publicado en el Journal of Physical Therapy Science.
Ayuda a gestionar las emociones
Plasmar preocupaciones con lápiz y papel es terapéutico. Favorece la liberación de emociones reprimidas y alivia el estrés y la ansiedad. Un estudio de la Universidad Estatal de Michigan plantea que "el simple hecho de escribir sobre tus sentimientos puede ayudarte a realizar una tarea estresante de manera más eficiente". Así, los problemas salen del "cajón mental" donde estaban almacenados y, en cierto modo, hace que tomes distancia de ellos al verlos "desde afuera".
Permite estructurar ideas
La anotación de objetivos, planes, proyectos o cosas pendientes te posibilita llevar una vida más organizada. Por otro lado, escribir a mano también incentiva a que las ideas fluyan. Grandes autores, como Stephen King, mantienen este hábito para los primeros bocetos de sus obras.
Evita distracciones
Cuando tomás apuntes con birome, aumenta tu capacidad de concentrarte en una tarea, contrario a lo que ocurre cuando trabajás en la PC o en el teléfono, pues es más fácil que te distraigas, por ejemplo, en redes sociales.