La canto terapia es una práctica emergente que a través de la música facilita la apertura emocional, permitiendo abordar diversas historias de vida y revelándose como un camino complementario para la sanación emocional y psicológica. En un contexto social marcado por una acentuada crisis socioeconómica, este método ayuda a las personas a manejar el estrés y la ansiedad y a expresar sus sentimientos más profundos, además fomenta la capacidad de escuchar y ser escuchados en un entorno seguro, empático y comprensivo.  En pocas palabras, los beneficios de la cantoterapia son amplios, sanadores y positivos.

Pero, ¿qué diferencia a la cantoterapia de una clase de canto tradicional? Para despejar esa incógnita, la artista Ivana Rasuk –dueña de la Escuela de Formación Artística desde hace 21 años- explica que en una clase personalizada se intenta crear un ambiente de confianza propicio para la charla, donde el alumno se expone ante el profesor y muchas veces el canto queda para los últimos 20 minutos. “Hay una diferencia entre ir a las clases buscando ser un artista o ir buscando a través del canto poder sacar algún dolor que tengo adentro atravesado, alguna historia de vida muy marcada. Me pasó de tener una alumna que cuando empezaba a cantar las lágrimas le caían de una manera que yo decía por Dios ¿que detrás de todo esto?”, detalla Rasuk.

Si bien enseña a niños, la profesora cuenta que en la mayoría de los casos son los adolescentes y jóvenes los que buscan en el canto un descargo emocional. “La música tiene una apertura y una llegada fabulosa: ayuda a quienes quieren hablar y ser escuchados. Siendo artista, por momentos, me siento una terapeuta, pero sin meterme demasiado y sin tal vez dar un consejo, simplemente escuchar o a veces abrazar y contener a esa persona bueno, te convertís un poco en eso, en ese maestro de canto terapéutico”.

¿De qué manera fomenta el bienestar la cantoterapia?

Esta experiencia tiene múltiples beneficios positivos para quien la practique: emocionales, curativos y sanadores de determinadas situaciones. “Cuando cantás algo lo decís, lo contás y lo expresas: gritas y lloras; una historia puede ser una hermosa historia de amor o un tremendo drama o un momento sanador. La música te interpela de una manera totalmente desconocida para muchas personas, el hecho de empezar a hacer canto abre el corazón, la cabeza y el alma”, sostiene la Rasuk.

La artista remarca que en algunos casos, el canto es recomendado por los médicos psiquiatras para personas que sufren de esquizofrenia, problemas de pánico, de ansiedad e incluso con problemas de tartamudez porque las ayuda a encontrar la fluidez. La música terapia se configura como un complemento de otras prácticas como terapia del movimiento, terapia conductual, expresión corporal, teatro, equino terapia, entre otras.

¿Cómo es una clase de música terapia?

Rasuk explica que lo ideal es que las clases sean relajadas y recomienda abordar al alumno desde una primera charla, donde cuente algo de su vida y si pasa algo mucho más fuerte se discute previamente con los padres o con alguien allegado hasta lograr ese nivel de confianza donde el alumno evolucione y se suelte. “Se trabaja primero la relajación, la soltura corporal, la percusión con el propio cuerpo, el conocimiento y reconocimiento del cuerpo como un instrumento. Después la técnica vocal, la sonoridad, la tonalidad. Y algo muy importante es cantar canciones con las cuales realmente se reconozcan y se sientan motivados. No se trata de cualquier canción elegida al azar, sino de alguna que les provoque alguna emoción y puedan desenvolver la interpretación vocal escénica”.

La artista remarca, además, que uno de los principales impedimentos suele ser la poca confianza en uno mismo y el miedo a no afinar. “A la persona que está intentando hacer cantoterapia como una posibilidad le digo que lo haga, porque es muy liberador del corazón, de la palabra y del alma, de los bloqueos mentales y de los que uno mismo se crea. A través de la música se puede dar un paso hacia la sanación y el bienestar”.

Por último, hizo hincapié en las características que debemos encontrar en un profesor de músicoterapia: “Ese profesor tiene que estar totalmente predispuesto a escucharte con amabilidad, a guiarte, contenerte y enseñarte y para que sea realmente una hora de bienestar y que vos cruces la puerta de la Academia con una sonrisa o preguntándote muchas cosas que van a hacer a tu crecimiento personal, en la música o en lo que sea que te esté pasando en la vida y vuelvas con más preguntas en la próxima clase”.