En medio del malestar por el irregular rendimiento en la temporada y por el propio empate amargo que, hasta ese momento, estaba cosechando Atlético, las cuatro tribunas del José Fierro se desconectaron un poco del presente y fueron transportados 15 años atrás. Es que, un 15 de junio de 2009, el “decano” se consagraba campeón de la Primera B Nacional, tras vencer 3-1 a Olimpo. Para recordar ese hecho histórico, la dirigencia homenajeó a varios de los integrantes de aquel plantel; entre ellos, Luis Miguel Rodríguez, que fue recibido a lo grande.
Sebastián Longo. César Montiglio. Lucas Ischuk. Tres nombres históricos en el “decano” que estuvieron en el reconocimiento. También Diego Erroz y Esteban Dei Rossi, dos nombres queridos por la hinchada, y José Saavedra, de perfil más bajo y menos actividad, pero también parte de aquel equipo dirigido por Héctor “Chulo” Rivoira, que también fue recordado con un video en la pantalla gigante. Pese a que recibieron sus respectivas ovaciones, ninguno generó el revuelo que causó el “Pulga” en las inmediaciones del estadio.
Ya en su llegada, acompañado de Mauro Osores, otro ex Atlético que actualmente viste los colores del “lobo” jujeño, el simoqueño alteró el ambiente. Grupos de hinchas se agolpaban para verlo pasar, saludarlo, pedirle alguna foto, e incluso, dedicarle un “bienvenido a casa”. El cariño por el histórico “7” empezaba a sentirse desde temprano.
El reconocimiento llegó en el entretiempo. Varios dirigentes del club esperaron a los campeones en el centro del campo, cada uno con una camiseta con el número que utilizaban los jugadores homenajeados. Los aplausos llovieron para todos ellos, con Montiglio, Longo e Ischuk siendo ovacionados unánimemente. Pero el que más aplausos y gritos arrancó fue Rodríguez, que estratégicamente fue presentado al último. Acompañado de su esposa, recibió la camiseta “7”, y disfrutó, en un terreno donde tantos goles supo hacer, y tantas ovaciones recibió, cómo la hinchada pedía por su regreso. “El Pulga va a volver”, se coreó desde los cuatro costados. Incluso, algunas banderas pidieron por su regreso.
Y no es casualidad el cántico. Hace semanas, se viene barajando la posibilidad de que el delantero retorne al club, ya en el tramo final de su carrera (en enero cumplirá 40 años). Pero, por ahora, no hay nada definido.
“Obviamente uno vivió muchísimas cosas en el club, así que muy contento de poder estar en este evento que es muy lindo, y obviamente estar en casa”, señaló el “Pulga”, admitiendo, lógicamente, su relación especial con el club.
“Es algo muy lindo, quiere decir que en su momento, cuando uno estuvo en el club, hizo las cosas bien, se consiguieron cosas muy importantes”, dijo, sobre el cariño recibido, asegurando que es “mutuo”.
Y aunque le bajó un poco la espuma -“queda la segunda rueda de la Primera Nacional”, indicó-, no ocultó sus ganas de volver a ponerse la celeste y blanca. “Ojalá que la vuelta sea pronto, uno también lo desea”, concluyó Rodríguez, que vivió una noche inolvidable en su casa. Una que, espera, pueda repetirse algunas veces más, pero con él usando la “7” del “decano”.