La llegada al cuarto de vida puede conllevar su propia crisis. Entre los 18 y los 30 años, los jóvenes suelen atravesar una serie de desafíos que los alejan de su niñez o adolescencia, y los obligan a afrontar las responsabilidades y los compromisos propios de un adulto mayor. En ese pasaje, mientras los jóvenes intentan conocerse y forjar su propio yo, también deben tomar decisiones vitales para construir su futuro, lo que suele generar un estado de incertidumbre agobiante y desconcertación. En esta “crisis existencial” aparecen con frecuencia la ansiedad, la angustia y la depresión: según un artículo publicado por The New York Times, se han convertido en los tres factores fundamentales por los que un centennial acude a una terapia psicológica. Son motivos muy parecidos a los detectados en un sondeo reciente de la juventud tucumana producido por LA GACETA.

“En los últimos años, Satya Doyle Byock, una terapeuta de 39 años, ha observado un cambio de tono en los jóvenes que acuden a su consultorio: pacientes frenéticos y extenuados en sus últimos años de la adolescencia, y entre los 20, y los 30 y tantos años. Estaban desconcertados y desorientados, con la sensación constante de que algo estaba mal”, introduce el texto firmado por la periodista Dani Blu.

Ahora bien, ¿cómo superar este estado de crisis? Según los expertos, los jóvenes adultos necesitan una guía clara para salir del enredo. En ese sentido, ante preocupaciones como la independencia financiera y familiar; las primeras experiencias de trabajo; los estudios superiores o las consecuencias que dejó la pandemia tanto a nivel sanitario como social, Satya Doyle Byock recomienda seguir los siguientes consejos.

1. Escuchate, tomá nota y corregí. Cada un tiempo estimado de tres meses, verificá en qué momento de tu vida te encontrás; identificá con qué aspectos de ella estás a gusto o disconforme, y analizá qué es lo que te gustaría cambiar. Consejo: prestá especial atención a cualquier detalle que despierte tu curiosidad, por más inútil que te parezca. Por ejemplo, aprender un idioma, tocar un instrumento, conocer un lugar, etcétera. “Empezá a darle a tu vida interior el respeto que merece”, menciona Doyle Byock

2. Todo a su tiempo. No debes estar necesariamente listo para convertirte en un adulto a los 18 años. Tratá de disfrutar de cada etapa, no te focalices tan sólo en la meta de tu objetivo y focalizate en el proceso. “En lugar de buscar soluciones rápidas, deberían pensar en objetivos a largo plazo: iniciar una terapia que se extienda más allá de un puñado de sesiones; crear hábitos saludables de nutrición y ejercicio, y trabajar para ser autosuficientes”, recomienda la especialista.

3. Forjá un equilibrio. Doyle Byock agrupa a las personas que están en el cuarto de vida en dos categorías: “las de la estabilidad” y “las del significado”. La primera de ellas son personas firmes y estables, que a veces tienen una sensación de vacío y piensan que “la vida no se puede reducir a esto“. Mientras tanto, en la segunda categoría, las personas son creativas e intensas, pero les cuesta trabajo enfrentarse a las tareas cotidianas. “Los de la estabilidad necesitan pensar en cómo darles a sus vidas un sentido de pasión y propósito, y los del significado necesitan obtener seguridad, quizás empezando con una rutina estable que pueda anclar y desbloquear la creatividad”, analiza Doyle Byock.

4. Ponete en "modo Yoda". Aún cuando parece haber poca estabilidad externa, hay que intentar mantener la calma en medio del caos. En momentos de crisis, la terapeuta sugiere ejecutar un conjunto de herramientas de autocuidado: hacer ejercicios para controlar la respiración; realizar un balance habitual de lo que agradeces, y mantener una rutina de nutrición saludable y ejercicio. “Son técnicas que pueden ayudarte a encontrar lucidez”, afirma.

5. Animate a pegar el volantazo. No le tengas miedo a hacer un cambio significativo, A pesar de la confusión y de las limitaciones que entraña, el cuarto de vida suele ser una de las etapas más libres. Identificá con qué aspectos no estás a gusto y animate a modificarlos.

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