Luego de la victoria sobre Alvarado y en rueda, el técnico de San Martín de Tucumán Diego Flores reconoció que no fue el partido perfecto el de su equipo. “Cuando repaso a cada jugador, me doy cuenta que hubo pocos puntos bajos. Pero más allá de que la producción después del gol no haya sido contundente, tuvimos una actitud para aferrarnos al resultado; con mucho despliegue físico”, dijo el entrenador, que destacó la importancia de haber ganado. 

“Fue una virtud habernos quedado con los tres puntos. Era muy importante para nosotros. Son entornos distintos y lo dominamos”, advirtió. 

En tanto, Flores no pudo abstraerse de lo que generó Darío Sand al llegar al récord de 987’ sin recibir goles. “Hago una mención especial para Sand, que quedó en la historia del club y del fútbol argentino. Con sus tres atajadas muy buenas le hizo honor. Tiene mucha importancia en nuestro equipo”, explicó y fue más allá. “Tenemos muy claro nuestro sueño e hicimos una gran primer rueda”.