Durante la época invernal, las bebidas calientes se vuelven las favoritas. Las infusiones tienen propiedades particulares que aportan beneficios al organismo. Además, la ciencia descubrió que una de las hierbas más utilizadas tiene condiciones provechosas por lo que es considerada una infusión que hace felices a las personas.

Se trata del té de lavanda que, aunque en Argentina no es el más difundido, es posible encontrarlo en las herboristerías en forma de saquitos o de planta para preparar la infusión.

Cómo preparar té de lavanda

Esta infusión puede aprovecharse durante todo el día, pero se recomienda que su consumo no sea sostenido a lo largo de varios días.

Está contraindicado para mujeres embarazadas y lactantes, niños, personas con alergia a la lavanda o similares o para diagnosticados con gastritis, síndrome de intestino irritable u otras enfermedades gástricas, epilepsia o Parkinson.

Preparar té de lavanda es sencillo:

1. Hervir el agua

2. Dejar que enfríe dos minutos

3. Agregar un puñadito de flores y hojas secas de lavanda

4. Dejar que repose 10 minutos

5. Mezclar, colar, endulzar y servir

Las propiedades del té de lavanda

Se afirma que las infusiones de lavanda hacen felices a las personas porque promueven el cuidado del organismo. Contiene varias propiedades que contribuye a generar sensaciones positivas.

Según un estudio publicado por la Hindawi Publishing Corporation, la lavanda funciona como sedante, relajante, antidepresivo, antiinflamatorio y digestivo. Al hacer estos aportes a la mente y el cuerpo, genera las condiciones necesarias para llegar a la sensación de felicidad.