Abandonar una práctica arraigada puede presentar sus dificultades. Para dejar de fumar tabaco, muchos eligen hacer un cambio y hacer una transición con los vapers o cigarrillos electrónicos. Pero el Ministerio de Salud Pública asegura que no es una alternativa idónea.
Para las personas que más fuman, abandonar el hábito puede generar una abstinencia de nicotina. Aunque este cambio de comportamiento no se manifiesta por igual en todas las personas, es habitual que aparezcan síntomas como:
- Tener deseos o ganas de fumar
- Sentirse irritado, malhumorado o molesto
- Sentirse nervioso e inquieto
- Tener dificultad para concentrarse
- Tener problemas para dormir
- Tener más hambre o subir de peso
- Sentirse ansioso, triste o deprimido
Por qué el cigarrillo electrónico no es una buena opción
El Ministerio de Salud Pública de la Provincia señala que los vapers tienen sustancias nocivas que irritan, dañan y pueden generar cáncer. Un cigarrillo electrónico no sirve como una terapia segura o eficaz para dejar de fumar.
Además, para muchos jóvenes representa la puerta de entrada a otros tipos de tabaco y, si bien lo hacen en cantidades ínfimas, afectan el medioambiente con sus emisiones de gases. En este sentido, el Ministerio señala los beneficios de los ambientes libres de humo de tabaco
En paralelo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó recientemente una alerta solicitando la regulación de los cigarrillos electrónicos, considerados productos que “no ayudan a dejar de fumar” y que “hay pruebas alarmantes de que perjudican la salud”.
Para dar una solución a los fumadores, el Ministerio de Salud lleva adelante el Programa Provincial de Lucha Antitabáquica. En él se realiza un acompañamiento multidisciplinario al paciente buscando que logre alcanzar un mejor estilo de vida sin contar con el cigarrillo en ella.