En la última semana Tucumán sumó casi 3.000 casos de dengue. Y la cantidad de muertos por la patología que transmite el mosquito Aedes aegypti trepó a 18. Aunque los contagios están bajando, las autoridades sanitarias aclaran que todavía no pasó el peligro. Esta fue la peor epidemia que sufrimos los tucumanos, con más de 60.000 contagios. Hubo un 50% más de enfermos que en el brote de 2023.
La directora de Epidemiología del Siprosa, Romina Cuezzo, confirmó que la cifra de fallecidos saltó de 11 a 18 en nuestra provincia. Son 13 mujeres y cinco varones los que perdieron la vida como consecuencia del la patología.
La cantidad de fallecidos, según explicó, se basa en la notificación de servicios públicos y privados. “Es un dato que se va actualizando, y puede corresponder a personas fallecidas en semanas previas. Cada caso tiene que ser analizado para saber si la muerte es atribuible a dengue u otra causa”, remarcó.
Aunque hubo contagios en todas las edades, desde bebés hasta adultos mayores, el virus ha sido especialmente duro con los jóvenes. De hecho, la mayoría de los tucumanos que perdieron la vida tenían entre 17 y 39 años.
Según figura en el Boletín Epidemiológico Nacional, Tucumán está entre las seis provincias con más casos fatales. En total, en todo el país esta temporada se han notificado 335 muertes por dengue. El 55% son mujeres. Según el informe nacional, los signos y síntomas más frecuentes entre los pacientes que fallecieron fueron: fiebre, cefalea, mialgias y artralgias, náuseas y vómitos, diarrea y dolor abdominal. En el 36% de las muertes se registraron comorbilidades. Las más frecuentes fueron: enfermedad cardiaca, obesidad, diabetes, enfermedad neurológica crónica e insuficiencia renal crónica.
¿La epidemia ha empezado a retroceder? ¿Tienen algo que ver las bajas en la temperatura? ¿Qué otros factores influyen?, le consultamos a Cuezzo. Según detalló, se viene observado un descenso en el número de contagios notificados semanalmente, pero todavía hay casos activos por lo que el virus sigue circulando.
Cuándo termina el brote de dengue
Diferentes variables pueden influir en el descenso de la curva epidémica, remarcó. “Las bajas de la temperatura es un factor, porque disminuye la población de mosquitos vectores de la enfermedad. Otra cuestión que influye es la disminución de personas susceptibles a enfermarse (muchos ya cursaron la patología), analizó.
Según precisó, se considera que termina un brote cuando se corta la circulación del virus. Para que esto ocurra tienen pasar al menos cuatro semanas sin detección de casos.
“Lo que hay que se debe controlar también es que no se mantenga la detección de casos en las semanas más allá de la epidemia, como sucedió en el NEA. Eso se logra sosteniendo la búsqueda de casos y la vigilancia epidemiológica”, remarcó.
Ahora, además, hay que estar atentos porque en el otoño tucumano suelen haber días templados y lluvias que pueden favorecer la proliferación de vectores transmisores de la enfermedad, por lo tanto, se deben mantener las medidas de control y erradicación de criaderos de mosquitos. Revisar el fondo de casa y eliminar todo tipo de recipiente que pueda acumular agua es esencial.
En el país
A nivel nacional se han reportado 492.792 contagios de dengue esta temporada. Los casos acumulados representan 3.4 veces más que lo registrado en el mismo período de 2023.
En medio de este brote histórico, el Ministerio de Salud de Nación, atendiendo a las recomendaciones de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn), decidió incluir la vacuna como parte del plan estratégico integral 2024-2025. El foco estará, primero, en la inoculación a jóvenes de 15 a 19 años, más allá de que hayan o no transitado la enfermedad viral. La inmunización se llevará adelante en las provincias más afectadas por la epidemia. Esta semana se reunieron los ministros de estas jurisdicciones. Por Tucumán, estuvo presente el doctor Luis Medina Ruiz, ministro de Salud.
Según se detalló, la campaña de vacunación gratuita entre los jóvenes arrancaría en agosto, para que este grupo etario esté protegido antes de un posible nuevo brote de la enfermedad.
La vacuna que se usará es la del laboratorio japonés Takeda, que ya estaba disponible en Argentina desde noviembre del año pasado, pero solo de forma privada. Desde hace dos semanas, en nuestra provincia, se está inmunizando al personal esencial: empleados del área de salud, de educación y de seguridad.
Por el momento, según aclararon, no es una vacuna para incluir en el Calendario Nacional para todas las jurisdicciones del país. La población objetiva será de personas de 15 a 39 años en departamentos priorizados según situación epidemiológica. Se dará inicio por etapas con la población de 15 a 19 años y se avanzará de manera dinámica, progresiva y escalonada según disponibilidad de vacunas.
El objetivo de la inmunización es disminuir la morbimortalidad por dengue. Se priorizarán aquellas zonas con alta tasa de incidencia acumulada de la enfermedad, explicaron. Además, tendrán en cuenta la estrategia que haya adoptado cada provincia, en especial las que ya están vacunando.