El presidente Javier Milei lloró durante la inauguración del busto de Carlos Saúl Menem, en la Casa Rosada. Afirmó que fue “el mejor presidente de los últimos 40 años” y que este homenaje significaba "un acto de justicia".
El acto se realizó al mediodía y allí estuvierno familiares, ex funcionarios y allegados al ex jefe de Estado durante dos períodos 1989 y 1999.
Estuvieron su hija Zulemita, su hermano y ex senador Eduardo Menem (de 86 años), y sus sobrinos, el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem y Eduardo “Lule” Menem, subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría General de la Presidencia. Además se presentaron otros dirigentes políticos de los años 90 que colaboraron en la gestión menemista.
Zulemita se acercó al estrado dispuesto en el lugar y brindó un discurso en el que habló sobre su vínculo con el ex mandatario y se emocionó al recordar sus años en el poder. “Como hija de Carlos Menem me siento honrada después de haberlo acompañado durante su ejercicio de la presidencia desde mi infancia”, relató en una breve alocución, según el sitio del diario "La Nación".
Eduardo Menem agradeció a Milei y a su hermana Karina, secretaria general de la Presidencia, por el “gesto” de colocar el busto. En ese marco aseguró que “tendría que haber sido puesto antes” y pero resaltó que no se hizo por la “mezquindad política”.
“Acá está toda la familia, sus amigos, ex colaboradores, a todos ellos les doy mi agradecimiento. Fue mi mejor amigo, mi guía en la política. Era un fiel creyente de la democracia. Toda su trayectoria se desarrolló siguiendo ese fundamental principio. Nunca ocupó un cargo que no haya sido voluntad del pueblo. Ejercía humildad social. Era amante de la paz”, agregó.
Milei, a su turno, dijo: “Un día como hoy, hace 35 años este hombre que estamos reivindicado, fue electo presidente de la Nación. Por eso elegimos esta fecha para hacerle un homenaje y colocar su busto en el lugar que corresponde”.
“Podríamos hablar horas de su extensa vida personal y política. Oriundo de La Rioja, abogado, el primer abogado de la colectividad sirio-libanesa en toda La Rioja. Apenas se recibió, se le acercan desde el peronismo y le dijeron: ’Afiliate al justicialismo y te designamos fiscal’. Menem contestó que no, que quería dedicarse a la profesión y que no iba a afiliarse por un cargo. Su pertenencia ideológica era innegable y sus principios inamovibles. Por un cargo no iba a hacer o dejar de hacer”, afirmó el libertario.
Y siguió: “Su primer cargo público fue gobernador, no tuvo escala previa en el Estado. Directo a la gobernación. Esto describe su audacia. Fue a internas en su partido y en 1973 fue elegido gobernador. Del sector privado a la gobernación, tal vez sea el detalle que más lo distingue a Menem respecto al 99% de los políticos de esa época. Era capitalista, venía del sector privado, sabía ganarse la vida sirviendo al prójimo, sirviendo bienes de mejor calidad a mejor precio”.
El 14 de mayo de 1989, Carlos Menem se impone a Eduardo Angeloz y es electo presidente. Seis años después de su primera victoria, el riojano obtiene la reelección. Ocho años después de ese triunfo, se baja de la segunda vuelta ante Néstor Kirchner.
El 22 de abril por la tarde, los líderes de La Libertad Avanza (LLA) decidieron remover el busto con la figura de Néstor Kirchner. En ese punto se ubicó el de Menem, el presidente al que Milei más admira por la gestión durante la década de los 90, marcada por las convertibilidad y las privatizaciones, entre otras medidas.