“Hay rumores de que mañana (por hoy) pelearán de nuevo”, contó Andrea Guerra, una comerciante de Crisóstomo Álvarez al 600, la cuadra que ayer fue el escenario de una batalla campal entre alumnos de la escuela Técnica N° 1 y el Instituto Privado de Tucumán (IPT). Por el hecho la madre de un alumno radicó una denuncia.

Las imágenes del pleito inundaron las redes sociales. En un video grabado desde el centro de la pelea por un periodista de El Siglo que pasaba por el lugar, se pudo ver las escaramuzas entre los estudiantes y las corridas. En el medio del conflicto, algunas madres y testigos intentaban ayudar a una agente policial que -sola- intervenía para separar al numeroso grupo de adolescentes: una tarea imposible.

La trifulca entre los bandos invadió la calle y obligó al tránsito a detenerse. En los videos se ve cómo un colectivo espera a que los menores despejen el camino para poder avanzar mientras que algunas motos hacen caso omiso y aceleran dando bocinazos entre los adolescentes implicados.

Hay otro video, más corto, grabado desde las alturas de un balcón, en el que se ve parte del pleito y las corridas de una vereda a la otra. Quedó registrado también el momento en el que llegan más efectivos a ayudar a la agente que intervino desde el comienzo y también cuando la madre de un alumno recibe un golpe.

Asombrados

“No es la primera vez que pelean, de hecho uno de los chicos que aparece en el video y se lo ve clarito se estaba peleando la semana pasada en la Chacabuco (al 100)”, indicó Susana, una comerciante de la cuadra. La mujer reconoció que la situación le dio algo de miedo. “Más de una vez vi que se peleen entre tres o cuatro, pero nunca algo como esto. Fue una batalla campal; quedé asombrada por el lío que armaron”, agregó.

Mariano Gómez es vendedor ambulante, pero trabaja principalmente por la Crisóstomo Álvarez por el gran movimiento que hay en esa cuadra, caracterizada por tres cosas: múltiples paradas de colectivos, varias escuelas e instituciones educativas, una zona bancaria e incluso la presencia de instituciones como el Tribunal Oral Federal y el Conicet; motivo por el que la circulación de personas es permanente. “Que corten así la calle por una pelea fue una banda, la verdad nos sorprendió a todos por eso. Ya se veía venir en realidad porque había muchos alumnos en la entrada y era como que esperaban a los del otro colegio”, explicó Gómez.

“Fue tremendo porque había hasta chicas peleando esta vez. Casi siempre son solo varones y unos cuantos nomás, pero sí hay pica entre las escuelas”, contó Guerra, una de las vecinas que vio el conflicto y quedó paralizada: “en ese momento no sabés qué hacer, tenés miedo de que alguno se golpee contra el vidrio del local o que por meterte te puedan pegar a vos”, indicó.

“Una bola de nieve”

El origen del problema no está claro. Lo que se supo es que el jueves pasado hubo otra pelea que habría desencadenado este nuevo episodio. Ayer a las 14, A.R se presentó en la comisaría 1ª y denunció que fue a buscar a su hijo y a su sobrino, que asisten al IPT, porque estaban siendo amenazados por alumnos de la escuela Técnica N° 1. “Cuando llegué intervine porque eran como 20 que los estaban patoteando”, declaró, y aseveró que recibió golpes durante el forcejeo.

La mujer contó que su hijo y su sobrino le dijeron que el problema había empezado el jueves pasado y que si bien no sabe las identidades de los agresores, desde entonces los dos adolescentes estaban recibiendo intimidaciones “a través de intermediarios para pelear”.

Guerra comentó algo parecido: luego de la pelea los participantes se habrían prometido que hoy continuarían la pelea. “Uno de los alumnos que entró al local para protegerse mencionó que todo el problema empezó por una chica hace unos meses, desde entonces hay dos grupos que viven peleando y eso se fue volviendo una bola de nieve”, indicó la vecina.

Uno de los detalles que figuran en la denuncia policial es que la vicerrectora de una de las instituciones implicadas no quiso precisar los nombres de los alumnos involucrados en el conflicto, alegando que se trataba de menores de edad. La vice señaló que le aportaría los nombres al Ministerio de Educación para que determine qué hacer con esa información.

“Llamamos a la Policía”

“Nos reunimos con el supervisor y con directivos de la otra escuela implicada en el suceso. Esto sucedió en la puerta de nuestra institución, cuando nuestros alumnos estaban saliendo de la jornada escolar de la mañana”, explicó Humberto Ávila, el rector del IPT, que explicó que hicieron lo que estuvo a su alcance para evitar el pleito. “Viendo que algo se estaba gestando afuera, con los docentes decidimos atrasar un poco la salida y llamar a la Policía. Les pedimos a los alumnos que no se retiraran hasta que no estuviésemos seguros de lo que iba a suceder, pero fue en un segundo, cuando apenas empezaron a salir algunos de nuestros chicos que comenzaron las corridas con los otros chicos que estaban esperando en la vereda”, detalló.

El apoderado legal del IPT, Marcos Gómez, añadió: “había alumnos de 5to año que pensamos que podían estar involucrados y a ellos no los dejamos salir. Se los veía nerviosos. Llamamos a los padres y les avisamos de la situación para que vinieran lo antes posible. De hecho, la madre de uno de los chicos se cayó en medio de la pelea cuando intentaba separar a su hijo”.

“Pedimos un móvil policial para que nos ayudaran a despejar a los alumnos de la otra institución que estaban plantados en la misma vereda”, explicó Gómez.

Por otra parte, los directivos de la escuela Técnica N° 1 prefirieron no hablar del tema con LA GACETA.