Desde su inauguración, el museo de San Martín llamó la atención de propios y extraños, y cosechó numerosos elogios. Son pocos los equipos argentinos que cuentan con museos propios, y para el “santo”, es un lujo contar con uno, que además, es muy vistoso Lo saben bien sus hinchas, que, unánimemente, celebraron la iniciativa. Pero también lo reconocen a quienes les toca visitar la provincia, y se pueden dar el lujo de conocerlo.
Desde esta temporada, por intermedio de la figura de José Reina, integrante de la CD, San Martín recibe a los dirigentes que acompañan a los equipos que llegan a Tucumán para visitar La Ciudadela, y los invita a una visita guiada, que queda a cargo de los integrantes del departamento de Historia y Estadísticas del club. Ayer, con Guillermo Brown, no fue la excepción; los dos dirigentes que acompañaron al equipo del sur del país visitaron el museo, y se retiraron sorprendidos por las instalaciones.
Y no son solo los dirigentes los “visitantes” que recorren el museo. También lo hacen las ternas arbitrales, antes de salir a hacer la entrada en calor. Ayer, el equipo comandado por Andrés Gariano, y completado por Marcelo Bistocco, Gonzalo Ferrari y Franco Morón, pasaron por el lugar, ubicado a metros de su vestuario, y también se deleitaron y asombraron con la estética, la modernidad y el material presente.
Gariano, que ya hizo el recorridos unas semanas atrás, cuando le tocó dirigir el duelo entre San Martín y Estudiantes de Buenos Aires en La Ciudadela, afirmó que el museo es “un lujo”. “Habíamos visto el proyecto, cómo iba a ser, pero no nos imaginábamos esto. Es algo de primer mundo; muy pocos clubes lo tienen”, aseguró el referí, que señaló que “el club es de la gente, así que esto va a pertenecer a la gente. Y que puedan disfrutar esto, es algo hermoso”.
E incluso, hizo una sugerencia a la dirigencia “santa”: incluir también elementos relacionados a los árbitros
“Somos parte del deporte. No seremos la pata más importante, pero somos una pata, entonces estaría bueno que nosotros también hagamos donaciones de tarjetas, silbatos, camisetas, para que quede también en la historia del club. Es más que nada una idea”, explicó Gariano. La iniciativa fue bien recibida por los directivos del club tucumano, y podría llevarse adelante.
Por otra parte, el museo tuvo ayer una jornada especial, teniendo en cuenta los 30 años del fallecimiento de Natalio Mirkin, histórico presidente del “santo”. Para honrar la fecha, en el museo se acomodó una de las vitrinas con todos recuerdos relacionados con quien estuvo al frente del club entre 1974 y 1992: reconocimientos, recortes de diarios, y muchas fotografías.