Alumnos de la Escuela Nicolás Avellaneda tendrán clases sólo dos veces por semana debido a problemas de infraestructura. Aulas inundadas, árboles caídos, escombros en los pasillos y muebles arrumbados son algunos de los indicios de la falta de preparación para recibir a los niños que muestran las imágenes enviadas por padres preocupados.
Según el director de la institución, las obras de acondicionamiento se detuvieron en diciembre y serán retomadas esta semana. “Supuestamente, tiene que volver a trabajar la empresa”, informó el director Roberto Quiroga, quien indicó que la constructora a la que le fue licitado el proyecto dejó de trabajar en el edificio de La Rioja al 800, que alberga a alrededor de 1.000 estudiantes, en el mes de diciembre “por falta de fondos”.
Debido a la imposibilidad de utilizar varias de las aulas de la escuela se redujo la cantidad de días de clase para alternar a los distintos grupos de niños en el espacio disponible.
En tanto, en las jornadas que los alumnos no tengan clases presenciales se les enviará un PDF a las familias con la tarea correspondiente. Son 10 los grados afectados, que corresponden al primer y segundo ciclo del primario.
“La situación de la escuela es difícil, tuvimos una reunión con el director y la supervisora donde nos explicaron la metodología”, comentó Laura, una madre de la comunidad educativa; esta semana su hija sólo irá a la escuela hoy martes y el jueves. “Como varias aulas están sin funcionar se van a turnar los grados para poder usar el patio”, señaló.
“El Ministerio conoce la situación y nos aseguran que están haciendo todo lo posible para solucionarlo”, declaró el director de la escuela. Y añadió: “Nos dicen que están esperando que deje de llover para poder empezar a trabajar; esperemos que el clima esté de nuestro lado estos días”.
Según un relevamiento realizado por el Gobierno durante diciembre, más de 1.000 establecimientos educativos en la provincia contaban con algún inconveniente de infraestructura.
La titular de Educación, Susana Montaldo, señaló durante el fin del ciclo lectivo 2023 que la Provincia invirtió $ 296 millones que serían transferidos a los establecimientos de gestión estatal para que se trabaje en el mantenimiento edilicio.
“Se realizarán tareas de mantenimiento y reparaciones menores en los edificios y predios escolares. Esto tiene como objetivo llegar al inicio de clases con nuestras escuelas en buenas condiciones para recibir a la comunidad educativa”, declaró en su momento la ministra.