“Es un partido aparte”. Jugadores, entrenadores y hasta periodistas repiten la frase cliché al hablar del superclásico entre Boca y River. Este duelo de gran rivalidad paraliza a todo un país y disputarlo es el sueño en la carrera de cualquier futbolista. Sin embargo, no todos tuvieron el honor de saltar al campo de juego en el partido más importante del fútbol argentino.
En la previa a una nueva edición que se desarrollará este domingo desde las 17, realizamos un repaso de los tucumanos que dejaron su huella en esta clase de partidos. En este caso, se tendrá en cuenta sólo los duelos oficiales entre “xeneizes” y “millonarios” a lo largo de la historia.
Por el lado de Boca, la lista se extiende a nueve futbolistas y Carlos Horacio Salinas es el que más partidos lleva en su haber.
El mediocampista, que se inició futbolísticamente en San Martín, tuvo un paso por River antes de llegar al rival de toda la vida. Con la camiseta de “la banda” disputó un solo superclásico en 1974 y rescindió su contrato por una particular situación.
Tras el 1-1 en el “Monumental”, cambió su camiseta con la del santafesino Marcelo Trobbiani y bajó a la confitería de Núñez con la del “xeneize”. Acción que le generó varios inconvenientes.
Finalmente, tras un breve paso por Chacarita, firmaría con Boca. En ese sentido, “Loco” formó parte de ocho superclásicos defendiendo los colores “Azul y Oro”.
En cuanto a números, quienes lo siguen en la lista son el extremo derecho Donato Alberto Penella y el mediocampista ex Atlético Antonio Apud, ambos con cuatro duelos.
Otros tucumanos que jugaron para el “xeneize” contra River son Martín Ramón Domínguez (1948 a 1951), Fermín Zelaya (1949), Marcelo Wenceslao Urueña (1949), Juan Carlos Navarro (1953 a 1955) y Juan Ángel Krupoviesa (2005 a 2009). Este último, muy recordado por aquella patada criminal a Daniel “Rolfi” Montenegro, por la fecha 11 del torneo Apertura 2006.
En tanto que el último antecedente de un tucumano enfrentándose al “millonario” se dio en 2016, con el extremo Sebastián Palacios. Con la camiseta de Boca, el actual futbolista de Panathinaikos de Grecia, conquistó el torneo local “Julio Humberto Grondona” y la Copa Argentina de 2015.
Momento de cruzar de vereda. Si tenemos que hablar de River, en el conjunto de Núñez son once los tucumanos. Pero, en este caso, uno tiene mayor trascendencia que otro.
Al hablar de números de superclásicos disputados, Alberto Cuello lidera la lista con 10 duelos contra los “xeneizes”. Considerado uno de los mejores defensores del fútbol argentino, defendió la camiseta de River desde 1932 hasta 1941.
En tanto que si debemos hablar de la importancia de los partidos, se destacan el Campeón del Mundo Exequiel Palacios y Matías Kranevitter.
El futbolista que actualmente defiende los colores de Bayer Leverkusen disputó la final de la Copa Libertadores 2018, que se desarrolló en Madrid. Al año siguiente, nuevamente con el "millonario" se enfrentó al rival de toda la vida, esta vez, en instancia de semifinales.
Por su parte, Kranevitter estuvo presente en la serie de octavos de final de la Libertadores 2015. Fue titular en el partido de ida en el “Monumental” y también disputó el primer tiempo de la revancha en “La Bombonera”, partido que River ganó por los puntos debido al famoso “gas pimienta”.
Los locales del “millonario” que se suman a la lista son Emilio Oscar Castro (1931 a 1932), Raúl Hernández (1955), Domingo Rodríguez (1959), Ernesto Juárez (1963), Salinas (1974), Gabriel Leopoldo Puentedura (1983), José Tiburcio Serrizuela (1989 a 1990) y Roberto Pereyra (2010 a 2011).
En el caso de Castro, el delantero tuvo la fortuna de ser parte del primer superclásico en la era del profesionalismo. Aquel partido que se jugó un 20 de septiembre de 1931, solamente duró 28 minutos. ¿Los motivos? Tres jugadores agredieron al árbitro con un puntapié, fueron detenidos y el Tribunal de Honor le dio el duelo ganado a Boca, por 1 a 0.
El domingo se jugará una nueva edición del superclásico por la Copa de la Liga y el único tucumano que podrá estar en la nómina lo tendrá el “millonario”, con Matías Kranevitter.