El temor de que haya dengue todos los años se hizo realidad. Antes, las epidemias de la enfermedad que transmite el mosquito Aedes aegypti ocurrían cada dos o tres años. Ahora, solo transcurrieron cuatro meses entre el final de un brote y el comienzo de otro. Y cada semana que pasa, van aumentando más los casos.

En los últimos cinco días, la cantidad de contagios en Tucumán se disparó: aumentó un 56%. Hubo alrededor de 178 casos por día y la provincia ya suma un total de 1.577 casos, según se informó ayer durante la “Sala de Situación”, que se realiza en el Ministerio de Salud. Hasta el miércoles pasado se habían reportado 687 pacientes con la enfermedad.

El ministro de Salud, Luis Medina Ruiz, sostuvo: “debemos tener en cuenta que tuvimos un fin de semana largo y eso aumentó la circulación de personas. Esto hizo que también se incremente la cantidad de casos. También influyeron el calor y las lluvias. Por eso debemos seguir trabajando activamente en los controles de foco. Y es fundamental el rol de cada ciudadano en sus hogares, lugares de trabajo, en plazas o parques, evitando tener cacharros que puedan transformarse en reservorios y criaderos de mosquitos”.

La directora de Epidemiología del Siprosa, doctora Romina Cuezzo, advirtió que, en comparación con el año pasado, no hay una gran diferencia, pero que sí se mantiene un ascenso en el número de casos de Dengue.

“No tenemos internados con cuadros graves. Notamos que los casos son de menor gravedad este año”, remarcó. También dio su opinión respecto de cómo está la epidemia a nivel nacional: en todo el país ya se registraron 50.000 este 2024. “El NEA, que es la zona con mayor cantidad de casos, parece haber llegado a su pico de notificaciones. No obstante, se siguen sumando departamentos con circulación autóctonas en algunas provincias como Jujuy. En Tucumán es importante reforzar las medidas de prevención”, analizó.

¿Endemia?

“Que se hayan presentado dos epidemias seguidas de dengue está indicando que el virus permanece activo en el territorio nacional todo el año; ya no necesita la reintroducción. Estaríamos hablando de una endemicidad del dengue en nuestro país”, explicó a LA GACETA Adrián Díaz, investigador del CONICET en el Instituto de Investigaciones Biológicas y Tecnológicas (IIByT).

Según detalló, luego de la reaparición del dengue en la década del 90, el virus tenía que reingresar todos los años desde países vecinos o a través de turistas que llegaban de zonas endémicas. Generalmente, las epidemias se daban cada tres o más años. Por ejemplo, hubo brotes en 2009, en 2016, en 2020 y en 2023.

“Pero ahora, por lo que vemos, el virus estaría activo y presente todo el tiempo. Esto es por que se dan condiciones para que se genere una amplificación importante del virus: por un lado, hay mucha abundancia de mosquitos y también de personas disponibles de enfermarse”, señala.

Segun remarca, la endemecidad del virus principalmente ocurre en todo el norte de argentina, en donde en el invierno las temperaturas no son lo suficientemente bajas para que se corte la actividad del mosquito y, por lo tanto, se corte la transmisión vectorial de la enfermedad.

“En el último invierno, las temperaturas fueron muy benévolas y la actividad del mosquito estuvo muy presente todo el año”, remarcó el especialista, convencido de que el cambio climático es determinante.

Según remarcó, el mosquito Aedes aegypti está muy asociado a la presencia del humano, sin importar su nivel económico. Sostuvo que este tipo de epidemias tienen mucho que ver con un problema de saneamiento ambiental.

Si bien cree que las vacunas y el desarrollo de insecticidas son importantes, la educación de la población es el factor más relevante, dijo. En ese sentido, explicó que no conviene confiarse en los insecticidas y en los repelentes, y acostumbrarse a vivir con los mosquitos y la basura.

Contexto

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió en las últimas horas una alerta epidemiológica por el aumento inusual de los casos de dengue en la región y Argentina no es la excepción. Las autoridades sanitarias pidieron intensificar los esfuerzos y las acciones de control del mosquito Aedes aegypti en los distintos países de América.

Según el último Boletín Epidemiológico Nacional (BEN), hasta la semana seis de 2024 se registran más de 48.000 casos de dengue y 35 muertes. En sólo una semana (entre la 5 y la 6, la última medida) se sumaron 9.000 contagios.

La OPS destacó en su reciente documento a la Argentina como uno de los países de la región que más está sufriendo este escenario epidemiológico fuera de lo habitual, lo que ya ocurrió en 2023 y se repite en lo que va de 2024.

Según el boletín nacional, si bien en el último trimestre de 2023 los contagios en Argentina bajaron, nunca se interrumpieron, como sí venía ocurriendo desde la reemergencia de la enfermedad en 1997. El año pasado se registraron 128.129 casos autóctonos y 71 fallecidos.